PAMPLONA - El cuerpo del villavés Zeru Cañada Zorrilla, de 25 años, fue hallado ayer de madrugada sin vida después de haber sido arrastrado por el río Sada, en el municipio de Ezprogui. El accidente ocurrió en una pista entre la localidad de Moriones y Gardalain, y el rescate de los restos mortales no pudo ser llevado a cabo hasta ayer por la mañana por el Grupo de Rescate Técnico (GRT), del Servicio de Bomberos, que requirió de la ayuda de un helicóptero.

El dispositivo establecido el lunes por la tarde por el Gobierno de Navarra en aplicación del Plan de Emergencia, nivel 1, por inundaciones en la Zona Media (Tafalla, Olite, Pueyo, Pitillas y Beire), encontró el cuerpo en ese punto, a unos 14 kilómetros de Sangüesa y unos 50 kilómetros de Pamplona. Fueron los bomberos de Sangüesa quienes pudieron ubicar el vehículo en la noche del mismo lunes, que se habría visto sorprendido por la crecida del río Sada cuando circulaba por una pista forestal.

El aviso del suceso fue realizado por el propio fallecido, que telefoneó a su hermano, que es bombero, en el momento que su coche era arrastrado por la corriente, según informaron fuentes conocedoras del caso. El hermano del joven llamó entonces, sobre las 20.25 horas, al parque de bomberos de Sangüesa y al centro de coordinación de emergencias de SOS Navarra informando de que su familiar había sido arrastrado por el agua cerca de localidad de Ezprogui.

Hasta el lugar se desplazaron efectivos de Policía Foral y de bomberos del parque de Sangüesa que localizaron el vehículo y observaron que, al parecer, su ocupante había logrado salir de su interior. Posteriormente, ya de madrugada, se pudo localizar el cuerpo del conductor a varios cientos de metros de distancia.

El rescate en ese momento resultó imposible por la cantidad de agua que discurría por la zona y por los difíciles accesos, que incluso impedían instalar iluminación, por lo que lo único que se pudo hacer fue asegurar el cuerpo hasta intentar llevar a cabo su rescate por aire. El accidente ocurrió en una pista entre la localidad de Moriones y Gardalain, en el término Municipal de Ezprogui y el rescate no pudo realizarse hasta ayer por la mañana, cuando las condiciones climáticas mejoraron.

RESCATE COMPLEJO Miembros del Grupo de Rescate Técnico (GRT) de Bomberos comenzaron ayer a primera hora las labores para recuperar el cadáver, que fue colocado sobre una camilla que fue izada hasta el helicóptero del Gobierno de Navarra. El cuerpo fue trasladado al Instituto Navarro de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Pamplona para realizarle la autopsia.

Agentes de la Brigada de Atestados de Policía Foral se hicieron cargo de elaborar el atestado del accidente y estudiar su dinámica, aunque todo indica que el joven circulaba por el camino de Usunbeltz y se vio sorprendido por la crecida del río Sada.