pamplona. Simone Moro y Denis Urubko continúan haciendo historia, ahora también con Cory Richards a su lado. Si el italiano y el kazajo habían cerrado hace un par de años el capítulo de las ascensiones invernales en ochomiles del Himalaya con la cima del Makalu, ayer mismo abrieron el de las invernales en el Karakorum. Hasta ayer nadie había logrado hollar ninguno de los ochomiles del Karakorum, pese a los recurrentes intentos en los últimos tiempos. Ayer en la cima del Gasherbrum II, Moro, Urubko y Richards rompieron esta barrera alpinística y escribieron una nueva página en la historia del ochomilismo. Y lo hicieron de la manera más elegante: en estilo alpino.

Según la página web de Simone Moro, a las 11.28 minutos (7.45 hora Peninsular) de ayer la cordada alcanzaba la cima del Gasherbrum II (8.035 metros) después de recorrer los más de 1.000 metros de desnivel que separaban el campo 3 de la cima, en unas ocho horas. Una vez hicieron cumbre, según el relato del alpinista italiano, comenzaron a descender velozmente hacia el campo 3, ante la amenaza del fuerte viento. Cuatro horas después de la cima los tres alpinistas se encontraban en el campo 3, "agotados", aunque sin congelaciones. Se calcula que la temperatura en la cima Gasherbrum II podía rondar los -37º, a los que habría que sumar el viento que haría que la sensación térmica fuese de unos -45º o -50º.

En principio, aunque dependerá de las condiciones del tiempo, Moro, Urubko y Richards tenían previsto continuar esta noche el descenso hacia el campo base, situado a 5.500 metros de altura. Se espera que entre hoy o mañana lleguen al campamento base. Allí les esperan el escalador vasco Alex Txikon, Gerfried Göschl y Louis Rousseau, que pretenden acometer la primera invernal del Gasherbrum I.