El Gobierno de Navarra exige a CAF que reparta el trabajo entre plantas para mantener viva Trenasa

“Si hay una disminución de la actividad productiva y tiene que tener consecuencias, que sean proporcionales, que no se cierre la planta navarra y haga reducciones pequeñas en las otras plantas. Si tiene que haber reducciones que sean proporcionales”, señaló ayer Ayerdi a preguntas de los periodistas. El consejero era señalado unas horas después por el presidente del comité de empresa de Trenasa, Miguel Ángel Molina (CCOO), que compareció en el Parlamento de Navarra, en referencia a la inversión de siete millones de eurosrealizada por Sodena en Vectia, una firma del grupo CAF que ha terminado por desplazar su actividad productiva a Polonia. “Ningún navarro quiere que su dinero acabe en el País Vasco o en Polonia, como está ahora mismo su apuesta de riesgo, ya que su compromiso era empleo y desarrollo industrial para la Ribera cuando se invirtió en Vectia”.

Ayerdi había explicado a primera hora de la mañana que el Gobierno de Navarra trabaja en dos direcciones. Por un lado, con la empresa, al considerar “inaceptable” un cierre que sería evitable con un reparto diferente de las cargas de trabajo. Y, por otro lado, con el Ministerio de Industria, ya que “juega un rol importante en todo lo que es el núcleo ferroviario”. En este sentido, Ayerdi se refirió ,al proyecto adjudicado a CAF por parte de Renfe al que se refirió la ministra de Industria, Reyes Maroto, como una opción para Trenasa: “Si uno ve y analiza las cuentas de CAF todo el mundo sabe que ese pedido no es de volumen importante para lo que es el volumen que maneja CAF para todas sus plantas en el Estado”.

Los argumentos que ha aportado CAF hasta el momento no convencen al comité de empresa, que ayer repitió ante el Parlamento de Navarra que la empresa es “rentable, viable, puntera y estratégica” y exigió a los Gobiernos y a los partidos que se impliquen “más allá” del respaldo recibido con el fin de evitar el cierre.

El presidente del comité, Miguel Angel Molina, afirmó que la situación es “ilógica y denunciable”. “La fábrica es viable, teníamos varios pedidos importantes en marcha y la plantilla había hecho un esfuerzo considerable firmando en junio un ERTE para salvar una situación concreta y asegurar el futuro de los empleos, ya que la empresa garantiza la carga de trabajo para 2021 y 2022. Tras tres meses de aplicación del ERTE vienen con el anuncio de cierre”, criticó. A su juicio, “el Grupo CAF condena de forma deliberada a la planta, porque es el grupo el que decide la carga de trabajo”. “CAF-Trenasa podría hacer un plan de viabilidad y asegurar los empleos”, indicó antes de apelar a “la cercanía” de la sede central, en Beasain como un elemento que puede “facilitar la intermediación” del Gobierno de Navarra.

Molina censuró que la empresa, “después de haberse nutrido de millonarias subvenciones o aportaciones de capital de dinero público, ahora pretende cerrar una planta rentable, viable, puntera y estratégica, destruir 110 puestos de trabajo e irse sin ningún tipo de consecuencias”. El presidente del comité explicó que a la compañía Vectia, “que se nutre de mano de obra de Trenasa, se le han aportado desde las arcas públicas 2 millones en los primeros años de actividad y siete millones en los últimos tres años, una autentica barbaridad”. “Por eso, es inaceptable la intención de CAF de cerrar Trenasa. Necesitamos resortes legales y normativos para enfrentarnos a este tipo de actuaciones que también han sufrido los compañeros de Gamesa en Aoiz”, dijo.

La fábrica de Castejón podría convertirse además, explicó Molina, en un eje para uno de los sectores claves del futuro. “La movilidad sostenible es el futuro y debemos conseguir que Navarra no pierda esta oportunidad”. “Con Trenasa abierta y fabricando trenes y autobuses, nuestra comunidad será un referente envidiable, un impulso económico de creación de empleo que además tanto necesita la Ribera. Vamos a luchar hasta el último minuto por el mantenimiento del empleo. La planta es viable, la zona se lo merece y no podemos dejar la economía de Navarra en manos de quienes se llenan los bolsillos con subvenciones públicas y se llevan la producción a otros sitios”, dijo.

Por último, Molina denunció el comportamiento de la dirección de la empresa guipuzcoana durante los últimos meses. Y recordó que la plantilla firmó un ERTE en junio con el compromiso de la empresa de garantizar los empleos hasta 2022, un expediente que “la empresa negoció de mala fe” ya que “sabían que iban a cerrar”, por lo que pidió que “inspección de trabajo trabaje de oficio” en este asunto. Asimismo, señaló que “tras revisar la documentación del expediente” han visto “que en Corella existe una filial de Trenasa”, ante lo que se preguntó “por qué es una filial de Trenasa y no de CAF”. “¿Se ha beneficiado de algún tipo de subvención? ¿Puede estar relacionado con no quebrantar las leyes de libre mercado y competencia? ¿Qué va a pasar ahora si Trenasa desaparece?”, cuestionó.

CAF, inflexible. Marcos Nieto del comité recordó que “la empresa ha dicho que va a cerrar Trenasa”. “Le incidimos en que queremos una reestructuración y en una reunión celebrada el martes nos dice que no va a ser el motor de nadie, ni va a buscar soluciones en ningún momento, ni va a buscar cómo mantener la empresa, directamente quiere su cierre”.

I-E pide intervenir. Marisa de Simón, de Izquierda-Ezkerra, fue quien solicitó la comparecencia del comité y explicó que la intervención del comité evidencia “una situación insólita e ilógica, estamos con una empresa que se pretende cerrar y que es rentable, que es eficaz, que no tiene problemas organizativos y no tiene problemas económicos”. “El Gobierno de Navarra y el Gobierno del Estado tienen que intervenir. Hay que evitar el cierre”.

Pérdidas ficticias. Marcos Nieto, también miembro del comité de empresa de Trenasa, aportaba datos para rebatir la supuesta falta de rentabilidad de la empresa de Castejón, que aporta la mano de obra más barata del grupo CAF en España, tal y como ha venido denunciando CCOO en las últimas semanas. Según indicó Nieto, CAF “se ha ahorrado casi 29 millones de euros en mano de obra” por las ventas generadas de la producción de Trenasa, que son “un 30% más baratas que si se hubiesen fabricado en otras plantas del grupo”. Asimismo, explicó que las pérdidas en las que se escuda Trenasa se sustentan en que en la planta de Castejón se encargan de realizar prototipos, un trabajo menos rentable por sí solo pero que se traduce posteriormenteen grandes ganancias cuando se llevan a otras plantas dedicadas a la fabricación en masa.

“Necesitamos resortes legales y normativos para hacer frente a estas actuaciones empresariales”

Presidente del comté de empresa