En su afán de actualizar y enriquecer el refranero popular de nuestra metrópoli foral con locuciones endémicas de cosecha propia, mi amigo el inverosímil pamplonés Fermín Huarte me propone un ramillete temático de neologismos localistas inspirados en Caja Navarra.
Sugiere como expresión equivalente a "abrir la caja de Pandora" la más foral "abrir la Caja de Navarra". Según la mitología griega, la caja de Pandora contenía todos los males del universo mundo. Caja Navarra parece guardar en su interior todos los males del micromundo foral. Así pues, cuando alguien va a abordar un tema peliagudo se le puede espetar aquello de "no abras la Caja de Navarra".
No obstante, mi inverosímil amigo también ha ideado locuciones de índole más coloquial. Por ejemplo, pretende que en adelante en lugar de decir "hacer caja" digamos "hacer Caja Navarra", en diáfana referencia a, entre otras, las opacas dietas de la susodicha entidad financiera.
En la misma línea, recomienda completar el conocido refrán "El perro es el mejor amigo del hombre" con la frase "La Can es la mejor amiga del expresidente". No hace falta ser José María Iribarren para percatarse de que el porqué de este dicho radica, amén de en el juego de palabras cánido, en el sueldo vitalicio que Miguel Sanz disfruta como miembro de la Junta de Fundadores. Aunque también se podría aplicar el refrán al cargo de exvicepresidente, habida cuenta de que el exvicepresidente foral José Antonio Asáin es el actual presidente de Caja Navarra.
El amigo Huarte plantea como sinónimo de la locución "Cuando los cerdos vuelen" la más parlamentaria "Cuando se cree una comisión de investigación sobre la Can"; ya que, a la vista de la fósil postura de PSN, parece más probable que un porcino alado surque el firmamento que que el Parlamento foral investigue cómo se han volatilizado los 1.700 millones de euros en los que estaba valorada la entidad financiera pública navarra, allá por 2007.
Al hilo de esa última expresión, Fermín parafrasea el conocido refrán "Dame pan y dime tonto" para convertirlo en "Dame Can y dime tonto". Y cierra el ramillete de neologismos endémicos con una variación sobre el mismo tema: "Al pan, pan; y al oscurantismo, transparencia total", evidentemente inspirado por las acongojantes declaraciones de la presidenta foral, Yolanda Barcina, en las que pedía "transparencia total" en torno a la entidad financiera navarra.