Obrero de fábrica cumplidor con su paquete de Marías en la taquilla y su bocadillo envuelto en Albal. Secretario minucioso de un puñado de pueblos con su red de relaciones entrañables y conflictos enquistados. Hortelano laborioso y creativo con sus experimentos de injertos inesperados en un mismo frutal. Apicultor aprendiz e inventor de técnicas y máquinas para extraer la miel de los panales. Curioso insaciable con oídos para todos y repertorio de jotas y rancheras a distribuir en comidas y cenas de Estella a Tokyo. A mi padre también le gustaba escribir. Memorias juveniles, viajes o reflexiones locales que Diario de Navarra le publicaba en Cartas al Director. Y le gusta. Hoy puede llenar una página de un cuaderno DIN A4 con la misma frase. No por mucho madrugar amanece más temprano. No por mucho madrugar amanece más temprano. No por mucho madrugar amanece más temprano. Esta secuencia se erige, para mí, en el punto álgido de El Resplandor. En ella Kubrick condensa uno de los miedos más sólidos que nos pueden acechar, constatar que una persona a la que amas ha perdido la cabeza. Se ha convertido en otra, demente. En el caso de Jack Nicholson, además, un demente psicópata que, quieras que no, añade una gotita más de tensión a la historia. El próximo lunes se estrena la primera Semana del Alzhéimer de la mano de AFAN. Nos recuerdan que en Navarra hay 7.000 personas que lo sufren, un 20% de ellas sin diagnosticar. Como ya sabéis, o vivís, a esa cifra hay que sumar, con suerte, otras 7.000 o 14.000 o 21.000 que son sus parejas, hijos? La ayuda económica máxima que concede el Gobierno de Navarra para dependientes severos no alcanza un tercio del sueldo mensual de un cuidador interno que libra dos horas diarias y los fines de semana. AFAN pide actualizar cuidados y políticas ante esta epidemia. Pura cordura.
