Sergio vuelve a su casa

PAMPLONA. Tres años y medio atrás, Sergio Fernández (Avilés, Asturias, 23-5-1977) se sentaba en la sala de prensa del Reyno de Navarra para su presentación. Ni se imaginaba que iba a vestir la camiseta rojilla tanto tiempo. Transcurrido ese tiempo, ayer, el central asturiano volvía a sentarse, pero esta vez para despedirse de la afición. Se va al Sporting, a su tierra, a tratar de devolverle a Primera. Se va un jugador diferente fuera del campo y fundamental dentro de él.

"No voy a seguir jugando Osasuna. Puede ser una sorpresa para todos, porque al terminar la temporada tanto el club como yo nos dábamos por renovados, pero, tras varias reuniones donde ha habido diferencias, no hemos llegado a un acuerdo. Han sido tres años y medio espectaculares y maravillosos; he disfrutado como nunca. Cuando me senté hace tres años y medio aquí no me podía imaginar esto", así se despidió Sergio de Osasuna. El asturiano y el club rojillo no han llegado a un acuerdo para su renovación. Hay que recordar que Sergio no renovó automáticamente por 11 minutos, pero Osasuna quería que siguiese un año más.

Sergio reconoció que ficha por el Sporting (horas más tarde lo hizo público el club asturiano) por los próximos dos años. Allí se reencontrará con Manolo, actual técnico, y al que definió como "amigo íntimo". Se va de Osasuna tras 89 partidos, cinco goles (4 en Liga y 1 en Copa), y momentos muy buenos, algo que le ha hecho cambiar de opinión sobre el club. "Me he llevado una sorpresa con todo lo que es Osasuna; equipo, club y afición. Tenía una idea totalmente equivocada del club y toda palabra de agradecimiento es poca. Osasuna, con los pocos medios que tiene es mucho más grande que otros clubes. Me han tratado de una forma increíble y por eso la despedida es más dolorosa. Ahora sólo puedo desear lo mejor a los rojos".

Reconoció también que cree que Mendilibar hubiese contado con él en el caso de continuar y expresó su agradecimiento al técnico de Osasuna. "Pocos me hubiesen aguantado lo que ha hecho Mendilibar". Pese a no renovar y afirmar que tuvo diferencias en la negociación quiso aclarar que no ha acabado "mal". "El club mira por su bien y a mí me ha surgido otra oportunidad. Jamás diré una sola palabra que deje entrever que no he estado a gusto. Al contrario, he estado increíble. Ángel (Martín González) que ha sido con quien he estado hablando, es una persona maravillosa y se ha portado muy bien conmigo".

También tuvo tiempo para recordar los mejores momentos de su etapa rojilla. "He estado en un sitio donde he sido competitivo; en un club en el que con su humildad, sencillez y con su afición se mantiene año tras año. Para mí ha sido un orgullo vestir esta camiseta. Me da pena marcharme por el trato que me han dado aquí, por la gente del club, por mis conversaciones con Iñaki (Ibáñez)... todo ha sido excepcional. No hay ni un segundo en el que pueda decir que mal he estado. Han sido tres años y medio espectaculares".

No se olvidó de la afición Como todos los jugadores que abandonan Osasuna, Sergio se marcha del club rojillo con una gran huella que le ha dejado la afición. "Jugar como local ante una afición que a muchos equipos querrían tener. Cuando estás de visitante deseas que se acaben los 90 minutos pronto, pero cuando eres el equipo local es una ventaja. Los números que tiene Osasuna son en parte gracias a ellos", comentó un Sergio que se mostró sereno durante toda la rueda de prensa. El de Avilés también recordó que, cuando llegó, su representante le dijo que Osasuna era un club donde podía estar "dos o tres años", pero que él no se creía que pudiese estar ese tiempo. Además, valoró en la situación en la que queda la posición de central tras su salida. "Lo importante de Osasuna es el conjunto. Hay jugadores más que capacitados para jugar de central, seguro que no se van a acordar de Sergio. Eso espero, de hecho". Hay que recordar que ahora mismo la plantilla queda con Rubén, Flaño, la polivalencia de Lolo y la más que posible vuelta de Oier ya que Roversio también ha dejado el equipo. De esta manera, Osasuna mirará el mercado para fichar otro central.

En Gijón, ilusionados Si la sensación que deja la marcha de Sergio en Pamplona es la de agradecimiento por el gran rendimiento en estos tres años y medio, en Gijón, su casa, el fichaje ha suscitado grandes esperanzas. "Allí están ilusionados y quiero intentar ver si podemos subir en Primera, sería el broche a mi carrera, dejar al equipo de mi ciudad en la máxima categoría", comentó el nuevo central del Sporting.

Sergio se formó en la cantera de la Escuela de Fútbol de Mareo y debutó con el Sporting en Primera División frente al Salamanca el 7 de enero de 1996. Ahora vuelve a las órdenes de Manolo Sánchez Murias y Tomás Hervás, excompañeros suyos en el Sporting y en el Celta.