Efemérides del Centenario

enía ganas de fútbol de Primera el seguidor de Osasuna. El último partido de Liga en la división de los grandes estaba anclado en un remoto 12 de abril de 1936 en una tarde aciaga en la que el Oviedo sentenció a los rojillos (4-5), Así que el 20 de septiembre de 1953 los aficionados enfilaron al estadio en un gentío inusual. Según explicaba el taquillero del club, Baldomero Franco, a ese partido del retorno ante el Español acudieron cerca de 15.000 espectadores, lo que suponía un récord de asistencia en San Juan. Descontados socios (3.500), pases de favor, etcétera, pagaron 9.510 aficionados que dejaron para las arcas del club 201.805 pesetas. Eso quedó en casa, porque los puntos se los llevó el Español (2-3).