La noria gigante que hoy se inaugura en Pamplona, en el parque de Antoniutti, promete ser la atracción de moda de estos Sanfermines, porque ha cambiado de ubicación desde el parque de la Runa, donde se inauguró el año pasado, al centro de la ciudad, en una atalaya privilegiada para mirar. Para curiosos, el viaje dura 9 minutos, y en el mismo suben a la vez 336 pasajeros, en 42 cabinas, o lo que es lo mismo, a 8 por cabina.
Un viaje en altura con más pasajeros que un Jumbo 747. En los casi 10 minutos del viaje se consiguen dar unas 5 vueltas enteras.
Bautizada como Noria Mirador Princess, este artilugio fue construido, como recuerda Rafael Llanes, de la empresa sevillana Mederyt, "hace dos años y medio, una parte en Valencia y otra en Sevilla". Se invirtieron nada menos que 600 toneladas de acero "comparable a 2 aviones Boing 747 o 460 coches Seat León", un importante proyecto del que no se conoce otro igual en Europa, y que ha supuesto para los promotores "una inversión de 4 millones y medio de euros". Como inspiración, los promotores se fijaron en la famosísima London Eye, la noria gigante de la capital británica, donde se pueden contemplar a 135 metros de altura las mejores vistas de Londres. La de Pamplona es "el mirador móvil más alto de Europa".
el éxito de pamplona
25.000 personas se montaron en los Sanfermines de 2012
Rafael Llanes reconoce que Pamplona, y sus fiestas de San Fermín, son para la empresa Mederyt "una plaza fuerte, porque la repercusión que tienen estas fiestas es importantísima, a nivel tanto nacional como internacional, para dar a conocer nuestra atracción". Ya el año pasado, la noria Princess recibió una extraordinaria acogida por parte de los pamploneses, y se calcula que unas 25.000 personas se embarcaron en esta aventura de altura. Desde el año pasado, la noria se ha instalado en Málaga y Zaragoza y en 2013 ha pasado por Córdoba. "Después, tenemos previsto volver a Málaga, Albacete, Zaragoza y Barcelona". Los promotores de esta iniciativa calculan que para amortizar la inversión necesitan "entre 4-5 años de funcionamiento de la noria y a buen ritmo". En esta apuesta, la empresa Mederyt ha recibido ya peticiones del extranjero, e incluso de países árabes. Eso a pesar de que su extremada altura hace que tenga que contar incluso con el permiso de la Agencia Española de Seguridad Aérea para poder funcionar e instalarse en determinados puntos de la geografía nacional, un requisito que "en Pamplona no hace falta por estar lejos del aeropuerto".
Mirar
Disfrutar de la panorámica sobre la ciudad
La noria gigante no es para el que busque emociones fuertes, metros de caída libre o poner la adrenalina al límite. Porque es, "más que una atracción, un mirador sobre la ciudad". Ver lo diminuta que resulta la plaza del Ayuntamiento a 70 metros de altura, cuando el día 6, a las 12 en punto, será un gigantesco centro de operaciones que dará cabida a más de 12.500 personas, o lo chiquito que se ve el Sadar, que cualquier partido de infarto se llena de rojillos hasta la bandera como si allí se acabara el mundo. Y alucinar de cómo el Arga, desde allí arriba apenas un garabato hecho con un lápiz, ha podido hacer tal estropicio en la ciudad hace tan solo unos días.
La noria ya está lista para echar a andar. Dos semanas han hecho falta para montar la estructura, que requiere echar mano de una grúa de 300 toneladas: "Las piezas son transportadas en 26 tráiler y se requiere un equipo de 20 trabajadores, entre técnicos y montadores especializados". ¿La seguridad? Hay un equipo que cuenta con ingenieros y cada día se realizarán 8 controles de la atracción, de carga, electricidad, etc. Este aparejo gigante requiere 16 motores eléctricos para ponerse en marcha "y lo más importante es que todo es digital", explica Rafael Llanes. La iluminación está dotada con 20.000 lámparas led, de bajo consumo. Son blancas pero "pueden cambiar de color". Hay que señalar que la noria cuenta con acceso "desde playa cero", es decir, al ras del suelo, lo que permite que accedan personas con discapacidad o en silla de ruedas. Ya dentro de la cabina, uno se puede poner incluso de pie, aunque la sensación de que no hay suelo bajo los pies no es apta para los que padezcan vértigo.
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Entradas gratis para niños en riesgo de exclusión social
Desde hoy a la una del mediodía la noria echará a andar, con un precio de 5 euros, y de 3 para niños que midan menos de 1,20. Asimismo, se va a contar con precios especiales para aquellas familias numerosas de tres o más hijos. En la inauguración de esta mañana, a la que se ha invitado al Ayuntamiento de Pamplona, el director general de esta atracción, Miguel Ángel Bañuls, hará entrega a la concejala delegada de Bienestar Social, Ana Lezcano, de 175 invitaciones destinadas a niños en riesgo de exclusión social, invitaciones que, según informa la empresa, "serán gestionadas por las instituciones y ONG con las que trabaja directamente esta área del Consistorio navarro, aunque, de momento no se ha informado de a qué entidad irán".
La noria permanecerá abierta hasta el próximo 14 de julio en el parque de Antoniutti.
