El Estado aumentó su gasto militar un 7,3 % interanual en 2022 hasta 20.300 millones de dólares (18.500 millones de euros), según un informe publicado este lunes por el Instituto Internacional de Estocolmo para la Investigación de la Paz (SIPRI).

Esa cifra, que equivale al 1,5 % del producto interior bruto (PIB) español, le permite situarse como el décimo sexto país que más gastó en armamento el año pasado, un puesto más abajo que en 2021 y supone una subida del 28 % en la última década.

Al alza en Europa

El aumento del gasto militar español se enmarca en una tendencia al alza registrada en 2022 en toda Europa, que regresó a magnitudes no vistas desde el fin de la Guerra Fría, debido al conflicto en Ucrania.

Europa fue el continente que registró una mayor subida interanual en la compra de armas, un 13 %, lo que unido al aumento de las tensiones en el este de Asia contribuyó a que el gasto mundial se situase en una cifra récord de 2,2 billones de dólares (2 billones de euros), un 3,7 % más interanual en términos reales (el doble sin contar la inflación) y el equivalente al 2,2 % del producto interior bruto (PIB) global.

El informe resalta que en Europa central y occidental se gastaron 345.000 millones de dólares (315.000 millones de euros), un 30 % más que en 2013 y una cifra que supera por primera vez la de 1989, coincidiendo con el fin de la Guerra Fría.

Finlandia, con un 36 % más, Lituania (27 %), Suecia (12 %) y Polonia (11 %) experimentaron los incrementos más acusados del presupuesto militar, y los planes lanzados por varios países hacen prever que el gasto en la zona seguirá creciendo en el futuro, resalta el SIPRI.

EEUU, China y Rusia

Rusia, tercero en la lista mundial, subió su inversión militar un 9,2 % hasta cerca de 86.400 millones (78.860 millones de euros), el 4,1 % de su PIB, mientras Ucrania experimentó un aumento récord del 640 %, el 34 % de su PIB, sin contar las donaciones recibidas de otros países.

A pesar de las subidas registradas en Europa y otras zonas, Estados Unidos mantiene su dominio incontestable a nivel mundial: gastó 877.000 millones de dólares (880.469 millones de euros), el 39 % del total y tres veces más que China, el segundo en la lista.