El exvicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias y la exministra de Igualdad Irene Montero han sido increpados al grito de "miserables" y "asquerosos" a su llegada a los juzgados de lo Penal de Madrid, donde está previsto el juicio contra el hombre que durante siete meses acosó al matrimonio en su chalé de Galapagar.

Nada más llegar, un grupo de personas han comenzado a insultar y a amenazar a Iglesias y a Montero chillándoles "miserables", "sinvergüenzas" "vende obreros", "asquerosos" y "aprovechados" entre otros improperios.

A su llegada, el exvicepresidente ha recalcado que a través de la estrategia "del acoso y la violencia" trataron de que dejaran este país y la política. "Acosaron durante meses a dos ministros de Podemos. Ojalá no haya impunidad y no vuelva a ocurrir. Si fueran ministros del PP y PSOE no hubiera ocurrido", ha dicho.

Montero ha subrayado que Miguel Frontera es "el instigador del acoso que sufrieron durante meses en su propia domicilio". "Es la punta de lanza de una violencia sin precedentes contra una formación política para impedir avances sociales", ha reseñado.

Tras ello, ha recordado que en aquella época había presentadores de televisión que emplazaban a hacer romerías a su casa. "La guerra judicial y mediática siempre ha quedado en la impunidad y esperamos que Miguel Frontera sea condenado", ha señalado.

Cuando la pareja ha accedido a los juzgados, se ha producido un fuerte encontronazo con un hombre que les ha increpado. Pablo Iglesias se ha encarado con él tras una valla. "Asqueroso, asqueroso, desgraciado, que eres un asqueroso", le ha espetado. En un momento de tensión, Irene Montero ha salido del recinto de los juzgados y ha pedido que interviniera la seguridad. Agentes de la Policía Municipal de Madrid se han acercado a la zona ante los incidentes.

El acusado, Miguel Frontera, afronta tres años de prisión por acoso e injurias a la pareja. Según el fiscal, esta actividad provocó una alteración de su vida familiar diaria y de sus actividades "derivada de los ruidos constantes en horarios de descanso de niños de corta edad, así como limitación de movimientos en compañía de los menores por temor a que presenciaran o escucharan expresiones ofensivas para ellos".

Relatan la angustiosa situación que sufrieron de su acosador

Iglesias y Montero han relatado en el juicio la situación de "angustia" y "estrés" que soportaban a diario con insultos a diferentes horas del día, lo que cesó en diciembre de 2020 hasta que intervino un juzgado.

En su declaración, el exvicepresidente del Gobierno español ha detallado cómo los incidentes de acoso durante meses a todas horas interfirió en su vida cotidiana, ya que era una "situación angustiosa" que se producía a diario a las puertas de su domicilio sin que se pudieran pedir la baja por los cargos que ostentaban entonces en plena pandemia del Covid.

"Insultaban a cualquier hora. Cualquier desplazamiento con los niños o para sacar a los perros, implicaba una logística desagradable", ha narrado Iglesias, quien ha recordado un incidente que se produjo una tarde al bañar a los niños y ver como una persona estaba subida a una roca grabando.

El expolítico ha señalado que el día de su cumpleaños, el procesado se saltó el perímetro y le dijo: "Felicidades, hijo de puta", extremo que el procesado niega. "Era una situación enormemente desagradable. Difundió vídeos por redes sociales", ha relatado.

"¿A usted solo le molestaba que pusieran el himno de España y no la Internacional --himno del Movimiento Obrero--", le ha preguntadoen su turno la abogada de Miguel Frontera, la letrada Polonia Castellanos. "¿Tenía usted selección auditiva?", le ha insistido la letrada en su interrogatorio. A ello, Iglesias le ha replicado que no iba a entrar en valoraciones políticas.

El exlíder de Podemos ha reconocido que hubo momentos que sintieron miedo porque un "lobo solitario" puede agredir o incluso atentar contra sus vidas. Además, ha relatado que conocía a Frontera porque era una persona pública y es una persona destacada en el entorno de la extrema derecha.

Por su parte, Irene Montero ha declarado que el acusado "vulneraba a diario la tranquilidad de la familia" y les sometía a una situación de nervios y estrés permanente en una época en al que eran "dos miembros del Gobierno" en plena pandemia y "tenían mucha responsabilidad".

"Frontera recorría el perímetro y mostraba detalles en vídeos. Siempre pensábamos que la cosa podía ir a más. Un día se encaramó a una roca", ha recordado. A veces, iba solo o acompañado con Javier Negre, según ha detallado.

"Era un momento de especial vulnerabilidad, de mi dependían por ejemplo las víctimas de violencia de género. Era una situación de nervios y estrés permanente", ha comentado a preguntas de la fiscal.

Polonia Castellanos le ha preguntado por qué dice que esto estaba instigado por "el señor Frontera", a lo que Montero ha contestado que lo dice porque el propio acusado así lo comentaba en sus redes sociales.