- ¿Qué efectos del confinamiento están detectando en los usuarios de su asociación?

-Realmente depende mucho de cada persona, pero de modo general, estamos detectando que hay a personas a las que les ha reforzado el haber estado estos meses sin acceso al juego, ya que ha aumentado su sensación de bienestar, y han podido valorar o prestar atención a otros aspectos importantes que forman parte de sus vidas, que quizás mientras jugaban no estaban pudiendo atender. Pero por otro lado, no podemos olvidar que la vuelta de eventos deportivos, la reapertura de los distintos espacios en los que se puede jugar, y la vuelta de la publicidad, traen un impacto negativo sobre todo en las personas que han sufrido o están sufriendo esta problemática. Por eso estamos retomando las pautas básicas para mantener la abstinencia: control económico, técnicas de control de impulsos, detección de pensamientos distorsionados con respecto al concepto de azar y juego, etc.

¿El confinamiento ha ayudado o ha perjudicado la situación de los jugadores? ¿En qué proporción?

-El concepto jugadores es amplio, ya que podríamos entenderlo como juego con o sin apuestas. En este sentido, con respecto a las personas que acuden a nuestra asociación vemos que el juego online sin apuestas ha incrementado en el periodo de confinamiento sobre todo en población joven, ya que las alternativas de ocio han disminuido en este periodo, y las alternativas de ocio relacionadas con las nuevas tecnologías, hoy en día, son muchas. Además, si tenemos en cuenta que una persona que ha desarrollado una conducta adictiva con respecto al juego, ha visto dañadas sus habilidades de planificación de ocio y tiempo libre, y/o sus relaciones sociales se han visto dañadas, es fácil que el ocio online haya sido una alternativa para ellos. Aun así, con respecto al juego que implica apuestas, vemos que durante el confinamiento, ha disminuido entre nuestros usuarios, ya que por protocolo todos realizan la autoprohibición de juego online.

¿Qué refieren los jugadores y cuál es la realidad que perciben?

-Muchos refieren haber estado muy tranquilos en el estado de alarma con respecto al juego, ya que no tenían acceso al mismo, dado que los locales estaban cerrados, y todos los socios tienen hecha la auto prohibición de acceso al juego online. También vemos que en muchos casos han disminuido los conflictos familiares, y ha aumentado tanto la comunicación con sus allegados como la sensación de control con respecto a su economía (menos gastos, mayor capacidad de ahorro, etc.), y sus vidas (disposición de tiempo para poder realizar otras actividades). Aun así, vemos que solicitan más conciencia social y ayuda con respecto a la sociedad, como por ejemplo la regulación de entrada a las salas de juego, regulación de la publicidad, mayor conciencia social de la problemática y acciones preventivas€ En este sentido, las medidas propuestas por el Ministerio de Consumo han sido muy bien acogidas por todos los participantes de la asociación.

¿Están recibiendo a nuevos usuarios que no estaban recibiendo tratamiento antes del confinamiento, cuyos problemas hayan aflorado?

-Es cierto que ni durante el confinamiento ni las primeras semanas de la vuelta a la normalidad hemos recibido llamadas. No obstante, las dos últimas semanas hemos recibido llamadas de personas solicitando ayuda. En general, lo que vemos es que estas personas refieren haber desarrollado el problema antes del confinamiento, pero el no poder jugar durante el mismo, y el haber vuelto a jugar ahora de forma impulsiva, ha evidenciado el problema.

¿Cuál es el perfil de estas personas?

-Sobre todo jóvenes de entre 20 y 35 años, y el tipo de juego son las apuestas deportivas y la ruleta.

¿En qué están haciendo hincapié al finalizar el confinamiento para que los jugadores no recaigan?

-Estamos trabajando en la identificación de estímulos que disparan los pensamientos o impulsos de juego, y la elaboración de conductas alternativas ante estas posibles situaciones. También trabajamos sobre los sesgos de pensamiento que se han generado con respecto al juego y el azar, y generamos alternativas de pensamiento realistas relacionadas con estos conceptos. Por último, es fundamental trabajar sobre el auto conocimiento y la identificación de las emociones, y aprender a determinar que estados emocionales son los que me hacen más vulnerable al juego. Estas son actualmente, las tres grandes líneas de trabajo que estamos desarrollado con los usuarios.

¿Qué deben hacer ahora los familiares de jugadores que están en tratamiento: redoblar la vigilancia o la confianza?

-Podemos decir que es una mezcla entre las dos posturas€ Por un lado es imprescindible reestablecer y acentuar las pautas que facilitan la abstinencia por parte de las personas de apoyo (familiares, pareja, etc.), pero por otro lado es fundamental transmitir confianza y generar espacios de comunicación para facilitar a las personas afectadas la detección de estados vulnerables con respecto al juego. Diríamos que ambas son fundamentales, pero hay que organizarlas de forma que sean efectivas. Por lo que sobre todo, lo prioritario es volver a ajustar las pautas que tienen que ver con las barreras de protección. Estas pautas son el control económico por parte de su persona de apoyo, que hace referencia a que la persona afectada lleve el dinero metálico justo para poder pasar el día y no tener acceso inmediato a al dinero (retirada de tarjetas), así como la justificación de los gastos y el cambio de hábitos (ocio saludable). Una vez tengamos esta parte en marcha, es fundamental facilitar la comunicación para que la persona afectada se sienta apoyada y escuchada, contribuyendo a la identificación de situaciones de riesgo, favoreciendo la gestión de los pensamientos y facilitando alternativas de conducta frente a los impulsos de juego como por ejemplo llamar a un familiar si se tienen impulsos de juego o ansiedad. Aun así, las personas que tengan cerca o estén sufriendo este tipo de problemática siempre pueden ponerse en contacto con nosotros y les facilitaremos asesoramiento y/o apoyo.

"Es imprescindible restablecer las pautas que facilitan la abstinencia, pero también es fundamental transmitir confianza”