Con un pie en la tradición y otro en la contemporaneidad, Israel Fernández interpreta músicas de la Ópera Flamenca, tras el éxito cosechado junto al guitarrista Diego del Morao en su disco Amor, lanzado en 2020. El artista todelano, gitano con ascendencia andaluza, ha publicado varios álbumes a lo largo de su carrera, como Universo Pastora, donde comenzó a desarrollar esta mirada. También ha grabado un vídeo en el reconocido estudio Colors, al igual que María José Llergo, Billie Eilish o Nathy Peluso, pero cantando flamenco al compás que dictan los nudillos. Su puesta en escena, personal y cuidada, le ha ayudado a la hora de consolidarse como una de las últimas grandes revelaciones. El cantaor cierra el mes de agosto con su actuación en el Flamenco On Fire, festival al que asegura tener mucho estima y cariño.

¿Cómo será la actuación del concierto en Pamplona? 

–Voy a hacer un concierto de ópera flamenco, del flamenco de los años veinte y treinta. Haré los cantes de esta época y también un cante a piano tocando yo mismo. Esa es la idea, pero soy un cantaor de mucha inspiración, por lo que, si en el momento se me ocurre alguna otra cosa, improvisaré. 

¿Cómo es el flamenco al que se refiere?

–Es el flamenco clásico, el cante clásico. En aquella época se hacían cantes por milongas, que ahora no se hace mucho, los fandanguillos, unos fandangos más líricos, las soleas de aquella época, con letras más antiguas. También haré un cante por seguiriya. En definitiva, voy a hacer un cante clásico. El nombre de Ópera Flamenca viene de que en aquella época el flamenco solo se hacía en los cuartos, en los cafés de cante. Por aquel entonces, en los teatros sólo estaba esa clase de música clásica y, cuando llegaron los flamencos, pusieron el cante flamenco en un teatro. Una vez se representó en el teatro, lo llamaron Ópera Flamenca. 

¿Por qué se ha decantado por este tipo de espectáculo?

–Yo hago las cosas de corazón, humildemente. Soy un cantaor muy aficionado al cante, tengo devoción por él, así que es una forma de recordarlo.

¿Qué espera del público de Pamplona?

–El público de vuestra ciudad me gusta mucho. Las veces que he estado allí me han recibido con mucho cariño. Es la tercera vez que voy a Pamplona, a este festival concretamente. Estoy muy contento, el Flamenco On Fire es uno de mis festivales preferidos porque hay un ambiente muy bonito, muy energético y en el que se respira mucho cariño. Creo que el público va a disfrutar mucho con la actuación.

¿Cómo vive el flamenco?

–Para mí el flamenco es una forma de vida. El flamenco no solo es música, es una forma de avanzar, una forma de querer y de enfadarse, una forma de vivir y comprender la vida. El flamenco es el mejor psiquiatra, el mejor psicólogo. Quien se acerque al flamenco se ha de acercar plenamente, escuchando el mensaje y las letras. Es una música trágica y alegre, una música que alberga todos los sentimientos. Estoy seguro de que quien se convierta flamenco va a disfrutar mucho más de la vida y de todo. 

Su último lanzamiento es una versión de Madrecita, de Antonio Machín. ¿Por qué esta canción?

–Yo no tenía previsto sacar esta canción, ha ocurrido de una forma super natural. Un día estaba en casa y me acordé de una tía mía, una tía muy dulce y a la que quería muchísimo. Ella falleció hace tres años. Aquella tarde me acordé de ella y pensé que esta canción era un bonito homenaje. Madrecita es una canción que me gusta mucho, una canción muy dulce, con una melodía muy bonita y una letra que sale del corazón. Me parecía un homenaje precioso a las madres.

¿Flamenco y norte son una buena combinación?

–Claro que lo es. Es cierto que en Andalucía hay mucho flamenco, pero aquí también lo hay. A mi me gusta utilizar una metáfora. El sol es un único sol para todo el mundo, no es más del norte que del sur ni tampoco al revés. Mira Sabicas, uno de los grandes maestros y es de Pamplona. Lo importante del flamenco es la forma de sentir, no de donde vienes. 

¿Cómo está siendo el verano?

–Está siendo un verano muy bonito. Estoy dando muchos conciertos por toda España, y a la vez estoy escribiendo y componiendo todo lo posible. Estoy rebuscando en el corazón para que lo que haga sea siempre de verdad. Estoy dando conciertos muy bonitos en sitios preciosos y se está acercando muchísima gente joven, algo que me llena de alegría, de ilusión.

“El Flamenco On Fire es uno de mis festivales preferidos, hay un ambiente muy energético y se respira mucho cariño”