El Museo Oteiza acoge la presencia de la obra Retrato de mi mujer, realizada por Jorge Oteiza, dentro de un conjunto expositivo centrado en la presencia de esta pieza, una de las más significativas de la producción artística del artista y que se muestra temporalmente hasta de junio de 2024. El préstamo temporal de esta obra ha sido posible gracias a la colaboración del Museo de Bellas Artes de Bilbao, entidad colaboradora del proyecto, ha informado el Museo Oteiza.

Jorge Oteiza realizó la obra Retrato de mi mujer en 1947 en Buenos Aires, poco antes de acabar su estancia en Latinoamérica y de regresar a Bilbao, un año más tarde. La obra, que retrata a Itziar Carreño, permaneció durante muchos años en Argentina y constituye uno de los bustos más relevantes del extenso conjunto de retratos, tanto figurativos como abstractos, que Oteiza esculpió a lo largo de su trayectoria, enfatizando así la condición referencial de la obra de arte.

Las mismas fuentes explican que la profundización en la condición espacial de la escultura constituyó la preocupación esencial de las obras de este periodo, que en este caso se manifiesta en el doble registro con que Oteiza abordó el dinamismo y la proyección del cuerpo escultórico.

Por un lado, la parte frontal de la pieza presenta una “expresión silente de trazos sintéticos, propia de una escultura esencialista dotada de un estatismo atemporal”. Por otro, el resto del cuerpo escultórico atiende a “una formalidad muy fluida y dinámica, que permitió al artista profundizar en las posibilidades espaciales del nuevo lenguaje que determina su proyecto estético”, avanzó el Museo, que lo expone en su segunda planta.