Hace más de dos décadas, Imcalift Elevación surgió como una pequeña empresa local dedicada a la fabricación de elevadores para viviendas unifamiliares, también conocidos como ascensores domésticos.

Su misión era eliminar barreras arquitectónicas en empresas y hogares, cubriendo la fabricación, instalación y mantenimiento de estas máquinas.

En aquel entonces, el mercado era joven y prometedor, con nuevas normativas de edificación que favorecían la accesibilidad y la eliminación de barreras.

Óscar Esparza, quien ocupa el cargo de gerente en la empresa navarra, detalla cómo Imcalift ha alcanzado un destacado reconocimiento a nivel nacional. La compañía se ha consolidado como líder tanto en soluciones de accesibilidad como en sistemas de elevación industrial.

Su presencia abarca sólidas delegaciones en Navarra, País Vasco, La Rioja y Madrid (incluyendo a Castilla-La Mancha y Castilla y León), además de colaboraciones extensas con ortopedias y profesionales en ascensores a lo largo de toda la península. Asimismo, destacan por contar con distribuciones exclusivas de prestigiosos proveedores europeos.

¿Cuáles son los desafíos específicos en términos de movilidad a los que se enfrentan las personas mayores en Navarra?

El tema de la accesibilidad ha sido objeto de regulaciones y normativas durante muchos años para facilitar la eliminación de barreras arquitectónicas. Actualmente, tanto en Navarra como a nivel nacional, la normativa exige que todos los edificios y viviendas particulares de nueva construcción, incluyan en sus planos el espacio necesario para la instalación de un ascensor.

El enfoque de la normativa siempre ha estado orientado a la instalación de un ascensor como solución única de accesibilidad y, aunque ciertamente es la solución más completa al permitir a usuarios de sillas de ruedas desplazarse por las plantas del edificio de manera autónoma, a día de hoy existen otros sistemas de elevación como alternativa que también pueden instalarse para eliminar las barreras arquitectónicas en hogares, comercios y comunidades de vecinos. Muchos de ellos no requieren realizar obra, son más compactos, menos invasivos y más económicos.

Se ha ampliado el abanico de soluciones y también se ha abierto ese enfoque para abordar las necesidades de las personas mayores en sus viviendas particulares, no solo en comunidades de vecinos. Antes no era habitual ver un ascensor instalado en una casa particular, por lo costoso que resultaba. Sin embargo cada vez se demanda más.

Por ello, es necesario seguir impulsando medidas que aborden la accesibilidad atendiendo a todas opciones disponibles y facilitar las ayudas a la eliminación de barreras arquitectónicas, independientemente de la antigüedad del edificio o de la edad de sus inquilinos.

¿Cuáles son las soluciones que aporta Imcalift para abordar estos desafíos?

Cuando comencé en Imcalift, antes del año 2000, no existían soluciones desarrolladas para brindar accesibilidad en viviendas particulares. Pero, como he comentado, la tecnología ha avanzado mucho y ahora contamos con productos que permiten resolver problemas de accesibilidad incluso sin realizar obras en casa, con instalaciones sencillas que se adaptan a viviendas nuevas y de antigua construcción. En Imcalift tenemos soluciones para cada caso, superando la limitación tecnológica que existía hace 20 años.

¿Cuáles son las innovaciones más recientes?

En Imcalift, tenemos plena confianza en nuestras ventajas competitivas y en nuestra capacidad para innovar con nuevos productos. Mantenernos a la vanguardia es de vital importancia para nosotros porque subraya el compromiso que tenemos con mejorar la calidad de vida de las personas, especialmente con las de movilidad reducida.

Es, por ello, que en la actualidad incluimos en nuestro catálogo opciones como la instalación de salvaescaleras y el elevador Stiltz. Este último destaca por su elegancia, su diseño compacto y por apenas necesitar obra. Puede instalarse en casi cualquier parte de la vivienda, allá donde otros ascensores no pueden. Al estar en la planta de arriba, la planta inferior queda diáfana y transitable, gracias a su avanzada y segura tecnología.

¿Qué balance hace de la compañía y qué retos se plantean para 2024?

Afortunadamente, el sector de la accesibilidad ha experimentado un impacto relativamente bajo por la pandemia. Las leyes actuales y las subvenciones existentes en Navarra –pueden financiar hasta un 50% de la obra total– favorecen la instalación de productos accesibles. Este contexto, sumado al continuo envejecimiento de la población y a una creciente conciencia sobre mejorar la calidad de vida de las personas con movilidad reducida, ha generado un notable crecimiento en este sector.

Gracias a estos resultados alentadores, hemos alcanzado una expansión global, estableciendo delegaciones exitosas en Costa Rica y Panamá. Asimismo, contamos con distribuidores autorizados en varios países, posibilitando que el 35% de nuestra facturación se genere más allá de nuestras fronteras nacionales.

Con nuestras delegaciones ya consolidadas en España, nos encontramos enfocados en expandirnos a corto plazo hacia otros países donde la demanda de soluciones de accesibilidad está en constante crecimiento.