Con las formaciones políticas todavía en fase de recuento de los votos en Pamplona y sin apenas tiempo para una reflexión serena de los resultados del domingo, el anuncio del presidente del Gobierno Pedro Sánchez de adelantar las elecciones generales al 23 de julio viene a añadir un poco más de incertidumbre a la ya de por sí complicada gobernabilidad del Ayuntamiento pamplonés.

Habrá que ver las consecuencias del adelanto y si afecta en algo a la elección de la Alcaldía que se celebrará el sábado 17 de junio, dentro de tres semanas, pero desde luego va a condicionar los contactos que lleven a cabo las fuerzas políticas que han obtenido representación.

La candidata de UPN Cristina Ibarrola aparece como la mejor colocada para hacerse con la Alcaldía, no porque sus resultados hayan sido para echar cohetes (ha bajado la representación en 2 concejales), si no porque la falta de una opción de consenso entre las fuerzas progresistas le puede convertir directamente en alcaldesa como candidata de la lista más votada.

La suya ha sido una victoria pírrica, menos de 3.000 votos de diferencia le han separado de Joseba Asiron, pero pueden ser suficientes para hacerse con la Alcaldía, como se encargó de remarcar tras acabar el recuento de votos.

Ibarrola reconoció cierta decepción por los resultados del domingo y dijo no estar “del todo contenta: Me sabe a poco esta victoria. Cierto que esperábamos más apoyo todavía para el que es el mejor proyecto para Pamplona”.

"Me sabe a poco esta victoria; esperábamos más apoyo"

Cristina Ibarrola - Candidta de UPN a la Alcaldía de Pamplona

Mirando de reojo a la sesión de elección de la Alcaldía, la candidata de UPN aseguró que “si el PSN y su candidata cumple y no regala la alcaldía a EH Bildu seré la próxima alcaldesa de Pamplona”.

Las alternativas a la derecha

Ibarrola consideró que Pamplona “sigue teniendo una mayoría amplia constitucionalista. Pamplona ha apostado hoy por un modelo de progreso, libertad y avance y no el de retroceso, imposición y sectarismo que representa EH Bildu”, ha dicho satisfecha.

La alternativa a Ibarrola es Joseba Asiron, que viene de cosechar unos resultados históricos en Iruña obteniendo 8 concejales, a solo uno de la lista más votada.

Durante buena parte del recuento de la noche electoral la candidatura abertzale fue la más votada, pero las últimas mesas del escrutinio permitieron a UPN recuperar la hegemonía y esfumar el sueño de una victoria.

La única opción de Asiron para ser alcalde por segunda vez pasa el apoyo expreso del PSN, una posibilidad que la candidata socialista Elma Saiz descartó antes de las elecciones y que el anuncio de Pedro Sánchez no ha hecho más complicar aún más.

La tercera vía, y la más improbable, es que una candidatura consensuada entre las 3 formaciones que integran el Gobierno de Navarra (PSN, Geroa Bai y Contigo-Zurekin) lograra el respaldo de los concejales de EH Bildu para impedir que la derecha mantuviera la Alcaldía de Iruña.