Tiene sólo 20 años, es refuerzo de esta temporada y en el poco tiempo que lleva vistiendo la camiseta de Osasuna Magna Álex Palazón ya ha dejado pinceladas de templanza, calidad y madurez bajo los palos. Su actuación del pasado sábado en la pista del Viña Albali Valdepeñas, pese a ser muy puntual, fue determinante para que los navarros se trajesen un empate y no una derrota, y vino a corroborar el acierto de su fichaje y la buena dupla que, parece ser, forma en la portería con un Asier Llamas cuyas intervenciones también resultaron claves.

Palazón (Molina de Segura, Murcia, 3/06/2003) tiene muy claro que ha llegado al Xota para crecer, para trabajar y para ponerle las cosas muy difíciles al capitán de Irurtzun. Sólo se han disputado dos partidos hasta la fecha y en los dos el guardameta formado en la cantera de ElPozo Murcia ha tenido participación. Ante el Barça (3-3), tuvo que salir a jugar al borde del descanso para sustituir a Asier, obligado a abandonar la cancha con dolor tras un encontronazo, si bien pudo volver sin problemas. Y frente al Valdepeñas (2-2) no le tembló el pulso a la hora de asumir la responsabilidad bajo los palos en dos lanzamientos de doble penalti, ejecutados por el exjugador del Xota Eric Martel. Ninguno de ellos se convirtió en gol.

Previamente, Martel ya había convertido un tiro desde los diez metros, superando a un Asier titular –y muy acertado en sus intervenciones– y colocando el 1-1 en el marcador. Pero cuando llegó el segundo, el portero de Irurtzun cedió su puesto a su compañero. “Miguel (Hernández) siempre me pide que esté atento, aunque no salga desde el principio. Siempre puede pasar algo durante un partido”, explica Álex Palazón. Y así fue.

Rozando el intermedio, y con igualada en el electrónico, el meta murciano se colocó frente a la red para impedir que el Valdepeñas se adelantase. Cubrió perfectamente la portería y evitó el gol. “Sabía que se trataba de taparlo al máximo, de irme a un lado e intentar pararlo”, recuerda. “Desde la zona izquierda de Eric Martel, siendo zurdo, iba a ser más difícil que la cruzara. Así que le dejé un poco de hueco en el primer palo, pensé que la iba a lanzar por ahí, me tiré y rocé el balón con el pie”.

“Si juega Asier, estaré a tope en el banquillo animando y preparado para cuando me toque”

No iba a ser su única gran acción del día. Cuando ya el partido encaraba la recta final, a falta de tres minutos y con un 2-2 en el marcador, Palazón regresaba a la pista para un nuevo tiro desde los diez metros. Y esta vez también supo leer las intenciones del exjugador del Xota. “Después de haber parado el primero, estaba confiado en salir y volver a hacer lo mismo. Me quedé más arriba porque me lo dijo Asier, que le conocía mejor, y con la parte alta del brazo detuve el balón”, recuerda.

El joven portero de Osasuna Magna, internacional con las selecciones sub-17 y sub-19, impidió así la victoria del Valdepeñas y recibió las felicitaciones de sus compañeros. “Al final son dos veces que se consigue mantener el resultado y que no se pongan por delante. Aunque también es verdad que Asier fue muy importante en este partido con todas las paradas que hizo. Es fundamental que nos complementemos”, apunta.

De la cantera de ElPozo

Álex Palazón es una de las incorporaciones de Osasuna Magna este año. El club ha apostado por el joven portero, que ha firmado por tres temporadas y proviene de ElPozo Murcia, donde se ha formado desde que tenía 12 años. “En ElPozo he conseguido todos los objetivos que tenía de chico, que eran jugar con la selección, debutar con el filial en su momento e incluso con el primer equipo. Y se agradece”.

Empezó en esto del fútbol sala en el colegio, como una extraescolar más, y después de cumplir el sueño de vestir la camiseta de ElPozo durante ocho años, Palazón vio que era momento de volar. “Quería coger minutos y experiencia, porque al final es un club en el que cuesta mucho subir al primer equipo. Se me presentaron varias ofertas, pero cuando vi la del Xota encima, ni lo dudé. Suponía irse lejos, pero también una experiencia única de jugar en Primera División y en un club histórico. No podía decirle que no”, explica.

A sus 20 años, es la primera vez que coge las maletas y sale de casa. Asegura que en su familia “se lo tomaron bien, ya que saben que es mi sueño y que sé arreglármelas solo”. “Mi madre además siempre está con la broma de ‘menos mal que te vas ya, lo que me voy a ahorrar en limpiar”, dice entre risas. De momento, reconoce que se está adaptando “bien” a Pamplona, una ciudad “muy bonita y tranquila”, si bien lo que peor lleva es el clima. “En Murcia te despiertas y sabes que sí o sí vas a salir en pantalón corto. Aquí es diferente...”

Álex Palazón es ambicioso. Sabe que lo va a tener muy difícil con Asier Llamas delante, pero está dispuesto “a entrenar al máximo y que el técnico me vea bien”. “Si juega él, yo estaré a tope en el banquillo animando y preparado para cuando me toque”, asegura. De momento, ya lo ha demostrado. Ha sabido aprovechar sus oportunidades, los minutos que se le han presentado, cumplir con creces con su cometido y ayudar al equipo en lo que estaba en su mano. El portero murciano ha llegado con toda la intención de quedarse.