El Xota recupera su trono

Los de Irurtzun apuraron hasta la última jornada de una primera vuelta espectacular para hacerse con una de las dos plazas de la Copa que aún quedaban por adjudicarse. La otra será para el Jaén, tras su victoria ante el Industrias Santa Coloma. Y junto a ellos competirán Barça, ElPozo, Manzanares, Jimbee Cartagena, Inter y Mallorca Palma Futsal. Una batalla de altura. 

Al Xota le bastaba con puntuar para estar en Cartagena. Y lo hizo, pero no fue fácil. Costó entrar en el partido. El Peñíscola no se jugaba nada, pero lo iba a dar todo. Compitiendo con todas las de la ley. A los alicantinos, además, se les puso de cara el duelo a los cuatro minutos, al marcar gol en propia puerta Fabinho tras un saque de esquina que descolocó a Asier. Mazazo para el Xota, que se veía obligado a remontar para que el sueño de Cartagena no se desvaneciera.

Lejos de echarse atrás, el Peñíscola apretó. No dejaba mover el balón con soltura a Osasuna, al que le faltaba un punto de intensidad sobre la pista. Quintela, Gauna y Pani ponían en apuros a Asier, quien se esmeraba con todo para atajar el peligro. Pero, en medio del asedio visitante, un nombre propio iba a aparecer sobre la mesa: Pachu. El ala vigués empataba primero con un tiro cruzado y posteriormente, en un minuto, ponía por delante a los suyos al hacerse con un mal despeje de Starna y anotar el 2-1 (m.12).

A partir de entonces, el Xota jugó con otra alegría. Con más velocidad y verticalidad. No pesó que Pani empatara para Peñíscola. Los navarros estaban enganchados de nuevo al partido. Y, con esa vigorosidad y bonitas transiciones, cayeron los goles. El 3-2 obra de Geraghty casi sin ángulo tras recibir de Eloy y el 4-2 de Linhares tras aprovechar un rechace de Starna al tiro de Saldise, con el que el partido se iba al descanso.

La segunda parte tuvo un protagonista indiscutible: Asier Llamas. El portero y capitán de Irurtzun tuvo que esforzarse sin tregua para evitar que el ingente peligro del Peñíscola tuviera sus frutos. Los alicantinos –con Gus ahora en la portería y Aicardo en la pista– salieron en vendaval. Dispuestos a darle la vuelta al partido. Presionando al máximo. 

Asier intervino con todo. Con unas manos providenciales para parar a Diego Quintela. Con el pie o con lo que hacía falta para evitar que José Mario o Plaza acortasen distancias.

Los de Miguel Hernández trataban de correr en cuanto el balón caía a sus pies, con más velocidad que acierto. Dani Saldise la tuvo, pero sin éxito. Asier, mientras, sacaba a bocajarro un tiro de Plaza que iba con la mayor de las intenciones.

Peñíscola quería, atacó con cinco a falta ya de seis minutos, pero el Xota se defendía con cabeza y con el alma. Había mucho en juego. Pero esta vez, el ganador iba a ser él. El electrónico no se movió y la victoria daba un billete a la Copa de España. Será la 16ª vez que Osasuna la dispute. Y, sobre todo, que la disfrute.

La felicidad de Miguel Hernández. Iñaki Porto