Ramón Lázaro Martínez, empresario navarro de 28 años, es el nuevo dueño del Tudelano, después de haber adquirido el 97% de las acciones por 1 euro, además de comprometerse a hacer frente a la deuda de 1.300.000 que tiene el club, tal y como ha reconocido en la rueda de prensa de la presentación de su campaña, cuyo lema es lema es “fidelidad por Tudela y volver a ilusionarte”. Lázaro empieza desde cero, no tiene nada que le ate, y ha reconocido que eso fue el 75% que le decidió a comprar el club, además de mostrar su motivación de llevar a Tudela por toda España. Este empresario quiere rodearse de gente joven y la ilusión es lo que quiere transmitir, tratando de eliminar la imagen de los últimos años.

La decisión de hacerse con el club la tomó en 48 horas. El lunes habló con la directiva, el martes tuvo un par de videoconferencias más y el miércoles firmó ante notario. Tiene un compromiso con los accionistas de que, si vuelve a vender el club con beneficios, tiene que dar parte a los accionistas porque ellos realizaron inversiones.

Sobre la deuda, Lázaro ha detallado que de los 1.300.000 euros, 300.000 son con la plantilla de esta temporada y aquella que ascendió al Tudelano la pasada campaña a Primera RFEF. Ha calculado que, en total, son entre 40 y 42 personas contando cuerpo técnico y jugadores.

El empresario ha criticado la gestión de los argentinos y mexicanos que estaban antes, la que ha calificado de “mala y lamentable” porque le está dificultando el llegar a acuerdos con jugadores que se sienten muy dolidos con la anterior directiva y con el anterior club, porque “algunos tenían que pedir préstamos personales para venir a entrenar a Tudela”.

Pese a todo, él ha dicho que está convencido de que antes del 1 de julio va a saldar esa deuda con los jugadores, lo que le permitirá jugar al Tudelano en Segunda RFEF, aunque puede haber un 5% de posibilidades de que no la salde por el mencionado enfado de los jugadores.

Lázaro ha asegurado que no ha venido a la entidad a generar más de deuda y que no es una deuda que viene del año pasado, sino que viene de diez o quince años atrás y parte de esa deuda es la que tiene de agua con el Ayuntamiento de Tudela, una cantidad que asciende a 130.000 euros y que la está pagando de forma aplazada con 7.500 euros al año. Otra deuda que tiene con el Ayuntamiento es el alquiler que pagan por Santa Quiteria y Clara Campoamor, correspondiente a dos meses.

En lo deportivo no ha trascendido el nombre, pero ha admitido que tiene firmado el entrenador para la próxima temporada. Una persona joven, exfutbolista que se retiró hace dos o tres años, y que formó parte de Osasuna, pero que no dirá el nombre hasta la temporada que viene por respeto a la actual plantilla.