En Lodosa, los txikis, que el viernes no tuvieron colegio, también llenaron las calles del municipio de alegría. A mediodía, como marca la tradición, todos ellos acudieron a la parroquia para que les bendijesen sus dulces y, acto seguido, muchos de ellos aprovecharon para ir a las barracas que han colocado estos días en el Paseo. Las actividades, además, continuaron por la noche con el monólogo de El Sevilla y este sábado tendrá lugar el día más intenso de estas fiestas; a partir de las 10.00 horas arrancará el XVIII Cross de San Blas Memorial Pedro Antonio Galilea, a las 11.30 horas saldrán los gigantes, y a las 15.00 horas, y con las entradas agotadas desde hace tiempo, tendrá lugar la comida popular en el frontón.

La bendición de los roscos endulza las fiestas de los más pequeños de Lodosa