La concejala de Estella-Lizarra Elisabet Ciordia denunció el pasado lunes al jefe de Policía Municipal del mismo ayuntamiento, Rodrigo García de Galdiano, por los acontecimientos ocurridos en la celebración del cohete de fiestas el pasado 4 de agosto, en los que fue retirada por la fuerza por el jefe de la Policía, tras exhibir una ikurriña en el balcón municipal. 

En la denuncia presentada por los letrados de Ciordia se asegura que sin recibir ninguna orden o requerimiento “notó que un brazo le agarraba fuertemente del cuello y le empujaba hacia atrás, perdiendo el equilibrio pero evitando caer al suelo al agarrarse instintivamente al mástil de una de las banderas colocadas en el balcón del Ayuntamiento”. En ese momento, la denuncia recoge que sintió un golpe en el muslo y notó como otro brazo empezaba a “estrujarle y presionarle fuertemente en la zona de los pechos, sintiendo asfixia, siendo sacada en volandas del balcón, de forma agresiva y violenta, sin que le diera tiempo a reaccionar de manera alguna”. 

Elisabet Ciordia (i) en el último pleno de Estella-Lizarra junto con otros concejales. Javier Arizaleta

En la denuncia se asegura que el incidente duró 7 segundos y que solo al final del suceso la denunciante se percató de que el causante había sido el jefe de Policía, Rodrigo García de Galdiano, al que la concejala de EH Bildu se dirigió para asegurarle que no era necesario “actuar de esa manera, con tanta violencia, con tanta fuerza”.

La denuncia también recoge el momento en el que, tras notar dolores en la espalda y en el tórax, se acercó hasta el centro de salud de Estella-Lizarra, donde tras la revisión el informe médico indicó que presentaba varias lesiones: “hematoma de 6 cm en muslo derecho y hematoma de 3 cm en tórax anterior, superior izdo., dolor a la presión moderada en un área torácica de unos 15 cm. No impresiona de fractura y dolor en hombro con exploración de movilidad normal. Precisa analgesia”.

La denuncia también recoge un precedente ocurrido en el mismo lugar y en el mismo momento del cohete de fiestas de 2019, “cuando otro edil del mismo grupo municipal de forma pacífica y también como un simple acto reivindicativo exhibió el mismo emblema, si bien, presuntamente por la condición de hombre y su gran estatura, le aconsejó no actuar con la misma agresividad que con mi representada, mujer y con un físico muy descompensado en relación al del denunciado”, señalaban los letrados de Ciordia.

En la denuncia presentada por la concejala Elisabet Ciordia contra el jefe de la Policía Local, se aseguraba que no era solamente por las lesiones sufridas, sino primordialmente “por el abuso de autoridad, el comportamiento violento y agresivo que, ante un acto tan pacífico, festivo y reivindicativo, había exteriorizado el denunciado”.

Dos denuncias

El caso de la retirada con fuerza de la concejal Elisabet Ciordia del balcón del ayuntamiento de Estella mientras mostraba desde el balcón municipal una ikurriña va tejiendo una maraña jurídica tras la que se aventura un final incierto. Primero por el archivo por dos veces del caso que decretó la jueza del juzgado número 2 de Estella-Lizarra, al no haber una denuncia personal de la concejala que ahora ya existe. Después, por una denuncia presuntamente del jefe de Policía en el día de los hechos, Rodrigo García de Galdiano, en la que se presentó, al parecer, un atestado de Policía Municipal que recogía una “posible infracción penal por desobediencia grave y resistencia a la autoridad” a la concejala de Elisabet Ciordia, pese a ser sacada a la fuerza por el jefe de la Policía Local del balcón. Con todo, 10 días después de hacerse pública en algunos medios de comunicación esta imputación, la concejala de EH Bildu aseguró que todavía no ha recibido ningún tipo de citación.

Por otra parte, Ciordia afirmó que la presentación de una denuncia contra el jefe de la Policía Municipal, Rodrigo García de Galdiano, dos meses después de los hechos se debía a la manera en que se habían sucedido los acontecimientos: “inicialmente no lo denuncié porque ya se habían abierto diligencias con el parte de lesiones que enviaron al juzgado de Estella desde el centró médico donde me atendieron el día del cohete”. Lo cierto es que aquellas diligencias fueron archivadas, “por lo que no existiendo denuncia de la persona ofendida, que es un requisito del procedibilidad en los delitos leves de lesiones del articulo 147.2 del Código Penal, no resulte posible iniciar el procedimiento y en consecuencia establecer si los hechos son constitutivos de infracción criminal, o no, y en su caso quién es el autor de los mismos”, aseguraba el auto.

Con la presentación de la denuncia de la concejala de EH Bildu contra el jefe de Policía, Rodrigo García de Galdiano, se abre una nueva perspectiva para la jueza del mismo Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Estella-Lizarra quien afrontará las denuncias existentes después de dos meses de lo sucedido: unos hechos que fueron vistos por millones de personas y que marcaron el comienzo de las fiestas de Estella-Lizarra el 4 de agosto de 2023.