Empecemos por lo importante: ¿Cómo va la salud?

Vamos tirando, que no es poco. Vivo gracias a la generosidad de una familia que en un momento de dolor decide donar los órganos. Mientras mi familia celebraba mi vuelta a la vida, otra familia lloraba la pérdida de un ser querido. La vida y la muerte en toda su crudeza.

Con todo, sigue en la lucha contra los resaltos. ¿Siente que ha conseguido algo en estos años

Se van dando pasos. Hoy los resaltos se debaten y se cuestionan, todo un logro. Que la consejera Tapia realizase una orden donde indica que no se podrán poner resaltos en las vías utilizadas habitualmente por las emergencias es una importante declaración de intenciones. Obtener el Premio Ciudadano Ponle Freno 2018 hizo que el problema de los resaltos fuese más visible.

¿Qué le dicen los diferentes responsables de la administración con quienes ha mantenido contactos a lo largo de estos años?

Todo son felicitaciones por mi investigación y compromisos de actuar. Luego, la realidad es otra.

Un informe de Urgencias de Osakidetza indica que no se deben poner resaltos en las vías de acceso a las urgencias hospitalarias. Una queja ante la Comisión Europea por las consecuencias de los resaltos en las emergencias tuvo como respuesta que, efectivamente, es así, pero que la capacidad de legislar es competencia de los estados.

¿Hay en nuestro entorno algún estudio oficial sobre la cuestión?

Es una de las carencias importantes, solo tenemos el informe de Urgencias de Osakidetza. En Navarra no hay nada. En el Estado, hay un par de informes.

¿Cómo afectan los resaltos al traslado de personas enfermas?

Una ambulancia pierde sobre 10 segundos por resalto. En el caso de una persona infartada cada minuto supone un 10% más de riesgo para su vida. Esto puede decidir que llegue vivo o no a las urgencias hospitalarias.

Muchos conductores se quejan de que también afectan a cualquier otro vehículo particular

Los resaltos atentan contra las partes esenciales de seguridad del vehículo, dirección, suspensión, frenos y neumáticos. Como consecuencia, accidentes.

Sin embargo, hay quien sostiene que son necesarios para amabilizar el tráfico. ¿Es así?

Nacieron con esa intención, pero su colocación masiva, indiscriminada y desproporcionada ha conseguido todo lo contrario.

De entre todos los sistemas de reducción la velocidad, ¿cuáles son los más peligrosos?

Sin duda, los resaltos. En un paso de cebra un atropello a 30 km/h el impacto es sobre las rodillas y el peatón cae sobre el capó. Ese atropello en un resalto a 30 km/h el impacto es sobre el abdomen con grave riesgo de lesiones internas y el peatón cae debajo del vehículo. ¿A quién estamos protegiendo?

¿Existe alguna alternativa para evitar que los conductores vayan lanzados por el interior de pueblos y ciudades?

Desde la propia administración se ofrecen varias alternativas. Entre ellas, está el radar. Creo que el radar de tramo es más eficiente.

¿Seguirá en la pelea?

Los años pasan y las fuerzas flojean, mis dos trasplantes renales sumados a otras patologías sobrevenidas pesan, pero sigo en la pelea.