El 17 de mayo de este año 2022, al leer esta noticia: "Navarra y Pirineos Atlánticos activan el tramo de la ruta ciclable EuroVelo 3 a ambos lados de la muga para favorecer la movilidad sostenible y el desarrollo local", me ilusione y pensé en lo bueno que era para la zona desarrollar un modelo de turismo basado en la sostenibilidad y el respeto debido al destino.

El tramo navarro de EuroVelo 3 o ruta de los peregrinos en bicicleta suma un total de 205 kilómetros, entrando por Orbaizeta hacia Aoiz / Agoitz, pasando por el valle de Arce (ese gran desconocido y en el cual vivo). Considero que es un proyecto muy interesante para estos valles, para visibilizarnos y crear vida en esta tierra. Y dotará a los cicloturistas del camino de Santiago de otra ruta mejor, más adecuada y en la que evitarán los conflictos que surgen al compartir una senda viandantes y ciclistas. Ayudará a mejorar la conexión entre pueblos y valles.

Pero el problema surge cuando no se acaban bien las obras y se dan por terminadas. Con un solo paseo uno se encuentra con el mal acabado de esta ruta: Firmes sin acabar 

-Falta de compactado en muchas zonas.

-El árido reciclado no está tapado y causa pinchazos. A la vista trocitos plásticos, cristales...

-En caminos anchos de siempre, escalón en el medio.

-Señalización errónea.

-Barreras canadienses que no impiden el paso de la ganadería. 

Creo que es importante acabar bien las obras, de momento ya está provocando quejas y ofrecernos calidad a nosotrxs y a los que vengan merecen.

Soy usuario de la EuroVelo 3 en diferentes tramos, suelo utilizarlos en las rutas que hago por la zona (Aezkoa, Erroibarra y Artzibar), y con un poquito más de esfuerzo podemos disfrutar de unas vías en bicicleta de gran calidad.