Una de las noticias destacadas de la semana en Navarra es que el presidente del Consejo Escolar de Navarra, Manuel Martín Iglesias, ha valorado positivamente el resultado de la votación del dictamen sobre la Orden Foral por la que el consejero de Educación, Carlos Gimeno, instaura la jornada lectiva partida para todos los colegios de infantil y primaria de Navarra, a la vez que anuncia la inmediata publicación de la resolución por la que se regulará el procedimiento para no implantar esa jornada partida sino otras.
Por 14 votos a favor, cuatro en contra y una abstención, el máximo órgano institucional de representación de todos los estamentos sociales implicados en la educación y la enseñanza no universitaria, con 36 miembros, apoya la promulgación de dicha orden foral. El Consejero Gimeno, dando por buena esta última palabra del CEN, remitirá el documento al BON en fecha próxima.
Para aplicar otro modelo de jornada se necesitarán mayorías cualificadas. El voto favorable de 2/3 de los miembros del Consejo escolar del colegio y de 2/3 del censo de los padres y madres.
Me pongo frívolo: al igual que en la votación del CEN, no acudir a votar es la mejor manera de dar la razón al proponente de la orden foral.
Como creo que no es esa la intención del Gobierno de Navarra, sino todo lo contrario en cuanto al fomento de la participación y el compromiso del voto en asunto tan fundamental como éste, espero que se guarde en un cajón la orden foral referida. Lo que no obsta para que se redacte otra coherente, que cuente al menos con el apoyo de una mayoría simple del censo. Así se cualifica.
Con el máximo respeto y humor. Lo que nos queda.
