El juez Santiago Pedraz ha citado el 29 de noviembre a onces exjefes de ETA para tomarles declaración como investigados por el asesinato del magistrado del Tribunal Supremo José Francisco Querol, el 30 de octubre de 2000 en Madrid, en un atentado con coche bomba en el que también murieron su escolta Jesús Escudero y su chófer Armando Medina.
En un escrito, al que ha tenido acceso EFE, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional precisa que el interrogatorio a cinco de ellos -Asier Oyarzabal; Mikel Albisu, Mikel Antza; Vicente Goicoechea; Ramón Sagarzazu, Ramontxu, e Ignacio Miguel Gracia Arregui, Iñaki de Renteria,- será de forma presencial.
El de los otros seis, que se encuentran internos en el Centro Penitenciario de Araba, se hará por videoconferencia, según indica el juez en esta Diligencia de Ordenación.
Se trata de Gorka Palacios Alday, Juan Antonio Olarra Guridi, Ainhoa Múgica Goñi, Javier García Gaztelu, Txapote, María Soledad Iparraguirre, Anboto, y Juan Carlos Iglesias Chouzas, Gadafi.
El juez les llama a declarar tras la admisión a trámite en diciembre de 2021 de una querella de Dignidad y Justicia en relación a este atentado que es uno de los más de 300 de ETA pendientes de resolver y que estaba a punto de prescribir.
Esta asociación de víctimas del terrorismo ha impulsado en los últimos meses varios procedimientos en los que se apunta a la responsabilidad de los exdirigentes en la comisión de diversos atentados, entre ellos el que le costó la vida al concejal del PP en Ermua Miguel Ángel Blanco hace 25 años.
Al admitir la querella por el asesinato de este magistrado, Pedraz solicitó a la Policía Nacional y a la Guardia Civil un informe sobre la estructura de mando de ETA en el momento del atentado y de forma específica quiénes era los responsables de su aparato logístico implicados en la introducción de la gran cantidad de explosivos utilizados para el coche bomba.
El coche iba cargado con más de 30 kilos de dinamita que al explosionar además de matar al magistrado Querol, a su escolta y a su chófer hirió a 64 personas y causó daños a más de 400 viviendas.
Además de estos datos, Pedraz reclamó información de los componentes del comando Madrid en el momento del atentado y en concreto durante qué periodo fue responsable del mismo Gorka Palacios.
