El Gobierno de Navarra garantizó este jueves que mantendrá las ayudas para hacer frente a la inflación aprobadas en los últimos meses. Se trata fundamentalmente de medidas en el ámbito fiscal. Algunas, como la reducción del IVA de la energía, están vinculadas a la política fijada por el Gobierno de España. Otras son de competencia propia, como la mejora de los mínimos personales y familiares, que han quedado consolidadas en el IRPF. La que en principio no se mantendrá es la deducción extraordinaria en el IRPF con rentas inferiores a 35.000 euros, aprobada solo para este año, y que ahora queda para el debate fiscal que comenzará en las próximas semanas.
El resto de medidas, las que competen al Estado fundamentalmente, están ahora mismo en el aire. Europa ha dado un toque al Gobierno central para que revise las ayudas frente a la inflación y el alza del precio de la energía. Así que podría haber un recorte de cara al próximo año, en el que volverán a estar en vigor las reglas fiscales de austeridad que limitan el gasto presupuestario. El Gobierno foral confía sin embargo en que el grueso de las ayudas estatales se mantengan, que Navarra prevé complementar con medidas propias en su ámbito competencial.
“Vamos a ver si seguimos en esas políticas del Gobierno de España para, desde Navarra, complementarlas”, apeló ayer el vicepresidente Félix Taberna, que garantizó la continuidad de las medidas aprobadas en el ámbito energético, como el apoyo al autoconsumo o la subvención a la instalación de energías renovables. Todo ello unido a un diálogo social “fundamental” y los descuentos en el transporte.
El Gobierno en todo caso rechaza que vayamos a entrar en una fase de “estanflación”, en la que se mezclan el alza de los precios con una pérdida de riqueza en términos del PIB. Taberna destacó así que, pese al “contexto adverso de la inflación”, se mantiene el crecimiento económico y de empleo, lo que ejerce de efecto “paliativo”. Y puso en valor el papel del diálogo social con sindicatos y asociaciones empresariales.
“Vamos a seguir con el desarrollo y el impulso de un crecimiento económico sostenible, que no deje a nadie atrás y afrontando los elementos de inflación con medidas de protección social, de aliviar a las familias vulnerables y pensando en reformas fiscales que ayuden a la liquidez de las empresa y las familias”, garantizó el vicepresidente, que aprovechó la ocasión para confiar en que, tras el nuevo proceso de investidura en el Congreso salga un nuevo Gobierno progresista que dé continuidad también a las políticas aprobadas los últimos años, como la subida de las pensiones, del SMI, las rebajas del IVA o la reforma laboral, que “ha impedido la precarización de los contratos”.
MÁS AMBICIÓN
Se trata sin embargo de un planteamiento insuficiente, incluso para los propios socios del Gobierno, que alertan de que la situación de las familias y de los colectivos vulnerables sigue siendo preocupante. “Más allá del trabajo que se ha hecho, que reconocemos, vamos a exigir que no se contente con las medidas del Gobierno estatal”, señaló el parlamentario de Contigo-Zurekin Miguel Garrido, que reclamó que la complementación a esas medidas del Estado “sea ambiciosa y suficiente para que las familias navarras no sufran más”.
Garrido destacó que desde hace varios meses las familias sufren una pérdida de poder adquisitivo continua, lo que se suma al incremento del precio de la vivienda, de la cesta de la compra y de las hipotecas, que en algunos casos supera los 300 euros al mes por el incremento de los tipos de interés. Por ello reclamó al Gobierno que ponga “en primera línea” la situación de las familias ante el aumento de los precios.
