El cáncer es la principal causa de muerte en todo el mundo; en 2020 se atribuyeron a esta enfermedad casi 10 millones de defunciones, casi una de cada seis de las que se registran, según la OMS. En el Día Mundial Contra el Cáncer hablamos con Fernando Aguirre, director general de Hawk Biosystems, sobre terapias inmunológicas, proyectos innovadores y del papel de las biotecnologías en la lucha contra esta enfermedad.

En los últimos años se está avanzando mucho en la investigación de nuevas terapias que utilizan las capacidades de nuestro sistema inmunitario para luchar contra el cáncer. Es lo que se conoce como inmunoterapia y su cometido es ayudar al sistema inmunitario, compuesto por glóbulos blancos, órganos y tejidos del sistema linfático, a combatir las infecciones y otras enfermedades. Para el responsable de Hawk Biosystems, “la inmuno-oncología es la gran promesa en la lucha contra el cáncer, desde un punto de vista terapéutico”. Pero señala que “la verdadera promesa es dejar de fumar desde un punto de vista preventivo”.

“La verdadera promesa es dejar de fumar desde un punto de vista preventivo"

Aguirre explica que a lo largo de nuestra vida todos los seres humanos generamos continuamente células tumorales que nuestro sistema inmune destruye. Sin embargo, en el momento en el que el sistema inmune ya no puede más y empieza a crecer el tumor es cuando se desarrolla el cáncer. “La inmunoterapia consiste en reforzar el sistema inmunitario y hacer que sea de nuevo capaz de acabar con el tumor”, expone.

Existen dos maneras de abordar los tumores a través de la inmunoterapia; por una parte, mediante las CAR-T, una terapia que consiste en coger los linfocitos (que son las células que atacan el tumor), hacerlos muy fuertes y volverlos a inyectar para que acaben con él.

La otra forma, tal como detalla Aguirre, es que los tumores tienen “un mecanismo de evasión y hacen que los linfocitos se queden adheridos a la superficie del tumor. En el momento en el que se quedan pegados, ya no pueden actuar contra él y éste se hace invisible para el sistema inmunitario”. En este caso, lo que pretenden estas terapias inmunes “es romper la interacción entre los linfocitos y el tumor con el objetivo de que pueda volver a actuar y pueda atacar al cáncer”.