La Sección Sindical del Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) en easyJet ha convocado este viernes una huelga en tres períodos de 72 horas cada uno, que se desarrollará los días 12, 13 y 14 de agosto; el 19, 20 y 21 del mismo mes; así como el 27, 28 y 29 "ante la negativa de la empresa a recuperar las condiciones laborales que los pilotos tenían antes de la pandemia, así como a negociar el segundo convenio colectivo".

Los pilotos aseguran que "se trata del último recurso posible, al haber fracasado todos los intentos realizados por los representantes de los pilotos para llegar a un acuerdo". Los pilotos aseguran que en la reunión de mediación, celebrada entre ambas partes el pasado 22 de julio, la empresa no presentó ninguna mejora a su propuesta.

Los representantes de los pilotos han convocado los paros tras más de seis meses de negociaciones y hasta seis reuniones en las que se han presentado tres propuestas sociales que, según indican, han sido rechazadas por la empresa.

Los sindicatos aseguran que "la buena voluntad" de la Sección Sindical de Sepla ha quedado más que patente en el proceso, al igual que durante los peores meses de la pandemia "en los que easyJet recurrió a la amenaza de una posible pérdida de puestos de trabajo para exigir al colectivo de pilotos una serie de renuncias laborales".

El "único fin" de la Sección Sindical de Sepla en easyJet es recuperar las condiciones laborales que los pilotos tenían en 2019, ahora que el número de vuelos es muy similar al que había hace dos años, así como retomar los negociaciones para la firma del nuevo convenio.

Según lamentan "la empresa se ha negado a atender cualquier petición del colectivo de pilotos y ha presentado una nueva propuesta que recorta aún más sus condiciones en términos reales". Los pilotos aseguran que aceptaron todas esas renuncias laborales no sólo para mantener sus puestos de trabajo en los peores meses de COVID-19, sino también para garantizar la propia supervivencia de la compañía en el Estado español.

La aerolínea easyJet opera con bases en toda Europa y tiene diferentes tipos de contrato de trabajo en cada país. Los sindicatos aseguran que "las condiciones de los pilotos españoles siempre han sido peores que las del resto y se ven aún más degradadas con la nueva propuesta de la empresa".