La llaman la pandemia del siglo XXI y no sin razón. La obesidad lleva décadas en auge y actualmente en Europa más de la mitad de la población tiene exceso de peso. La tendencia es al alza, aunque en los últimos años se haya estabilizado, y la Comunidad Foral no escapa a esta realidad: según el Plan de Salud Pública de Navarra 2022-2025, el 46,7% de la población padece exceso de peso –uno de cada diez tiene obesidad (13,2%) y uno de cada tres (33,5%), sobrepeso–. Se trata de unas cifras preocupantes para los expertos, pero la realidad es que Navarra presenta las tasas de exceso de peso más bajas de todo el Estado.

Para hacerse una idea, la media estatal es de 53,6% –un 16% padece obesidad y un 37,6% sobrepeso– y la comunidad con una tasa más alta es Murcia, donde el 59,8% de su población tiene exceso de peso: uno de cada cinco tienen obesidad y dos de cada cinco, sobrepeso. Cabe destacar que estas cifras se obtienen a través del Índice de Masa Corporal (IMC) –peso/estatura al cuadrado– siendo sobrepeso si el resultado es superior a 25 y obesidad a partir de 30.

Según el informe de Salud Pública, en los últimos 20 años la tasa de sobrepeso en Navarra se ha mantenido estable e incluso ha descendido ligeramente: en 2001 era del 37,4% y en 2020 –último año con datos– disminuyó al 33,5%. Pero la obesidad se ha duplicado en estas dos décadas, pasando del 7,3% de 2001 al 13,2% de 2020.

La jefa de Nutrición del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario de Navarra (HUN), Ana Zugasti, explica que las cifras de exceso de peso en la Comunidad Foral llevan estables un tiempo, “sobre todo porque en la población adulta mantenemos las cifras más o menos estables, pero en la población infantil han ido creciendo en los últimos años y eso sí que es preocupante”.

El plan de Salud Pública no aporta datos actualizados sobre la prevalencia del exceso de peso en menores de edad, pero los expertos coinciden en un incremento disparado en los últimos años. Los últimos datos son de 2017 y revelan que el sobrepeso afecta al 22,3% de las niñas y al 22,4% de los niños de 0 a 5 años y al 31,3% de las niñas y al 31,1% de los niños de 6 a 9 años. En cuanto a la obesidad infantil, la prevalencia era del 5,7% en niñas y de 6,2% en niños en el tramo 0-5 años, mientras que en el tramo 6-9 era del 10,2% en niñas y del 13,1% en niños.

Cambios sociales

Sobre las causas, Zugasti apunta a “cambios en la alimentación y en la práctica de ejercicio físico”. “Puede haber muchos motivos para que una persona tenga un exceso de peso, puede haber factores genéticos, moleculares y otros trasfondos, pero sin duda que los hábitos de vida no sean saludables es algo que hay que revisar y nos encontramos con que cada vez se dedica menos tiempo a cocinar o a comprar productos frescos y que la gente no hace ejercicio físico”, sostiene.

Precisamente, la especialista incide en que los casos de obesidad severa se dan en personas que por lo general no han hecho actividad física desde pequeños. “El problema es que cuando tú no has hecho deporte desde pequeño de mayor cuesta aprender a comer bien, pero todavía más a hacer deporte. Es difícil cambiar de hábitos”, explica.