Todos los centros escolares públicos –y los concertados que así lo deseen– deberán decidir qué tipo de jornada quieren a partir del curso escolar 2024-25: partida, continua o flexible, una decisión que se extenderá durante los siguientes cuatro años, tiempo en el que los centros no podrán volver a consultar acerca de la jornada. El departamento de Educación remitió este lunes al Portal de Transparencia del Gobierno de Navarra el proyecto de orden foral por el que se regulan los tipos de jornada escolar en los centros educativos en el que se incluyen varias novedades y que está abierto a aportaciones de la comunidad educativa hasta el próximo 15 de septiembre.

Lo que propone Educación es que todos los centros públicos que imparten enseñanzas de segundo ciclo de Educación Infantil, Primaria y Educación Especial decidan este curso 2023-24 qué jornada van a querer a partir del curso 2024-2025, con independencia de que ya hayan podido someter a votación el cambio de jornada en los últimos años. De hecho, la orden foral contempla un reseteo a partir del curso 24-25, ya que la modalidad para todos los centros escolares será la jornada partida. Es decir, aquellos centros que deseen tener jornada continua –la tengan ya o no– deberán volver a elegirla mediante un proceso de votación.

Sea cual sea el resultado final –quedarse con la partida o cambiar a la continua– los centros no podrán acogerse a una nueva convocatoria de elección de jornada hasta transcurridos cuatro años académicos a contar desde el curso en el que se hubiera iniciado el procedimiento. Hasta ahora, si la votación de cambio de jornada no salía adelante podía volver a presentarse un nuevo proceso de elección al año siguiente.

Decidir sobre el tipo de jornada será obligatorio para todos los centros públicos, no así para los privados y concertados, en los que es la titularidad de cada colegio la que decidirá si inicia o no un proceso de votación para elegir el tipo de jornada. Según detalló ayer el departamento, esta orden foral busca finalizar el carácter experimental de las jornadas continuas y flexibles que, de forma progresiva desde el año 2007 y mediante prórrogas anuales, se fueron implantando en los centros educativos, y otorgar así el mismo carácter oficial del que dispone la jornada partida a las modalidades continua y flexible.

El 25% del Consejo Escolar

Durante este curso todos los centros tendrán la posibilidad –y obligación–, a través de sus direcciones, de solicitar al departamento de Educación la elección de jornada. Con carácter anual, estas direcciones convocarán una sesión de Consejo Escolar al objeto de decidir sobre la posibilidad de proceder a un cambio de jornada. Para ello se realizará una votación directa y no delegable en la que, para poder proseguir con las actuaciones, se requerirá el voto favorable de, al menos, el 25% de las personas componentes con derecho a voto del Consejo Escolar. 

En caso de haberse alcanzado ese porcentaje, el segundo paso sería que el Consejo determine la modalidad o modalidades de jornada que serán consideradas en el procedimiento de votación, debiendo contar para cada una de ellas con al menos el 25% de votos favorables del Consejo Escolar. Todo ello deberá contar con el posterior visto bueno de Educación para considerar iniciado el procedimiento de elección. En el caso de que ninguna de las jornadas propuestas obtenga el visto bueno del departamento, se archivarán las actuaciones, se mantendrá la jornada que tuviera implantada el centro, que quedará eximido de la limitación temporal de estar 4 años sin volver a iniciar un proceso de elección.

Las familias, las primeras en votar

Una vez obtenido el visto bueno, los centros deberán iniciar las consultas a la comunidad educativa comenzando, como novedad, por las familias. Previamente a las votaciones, el equipo directivo deberá organizar una reunión para informar a las familias sobre la motivación, características de la nueva jornada y cuanta información sea requerida. El censo de votantes, elaborado por el equipo directivo, estará formado por las familias o representantes legales del alumnado matriculado en el centro, excluido el de 6º de Primaria. Cada familia tendrá derecho a un voto por cada hija o hijo. Si la guardia y custodia del menor es compartida, los cónyuges deberán ponerse de acuerdo para la emisión de un único voto. El cambio de jornada se llevar a cabo en caso de que se alcance el voto favorable de al menos 3/5 del censo total de familias (60%). Por tanto, la orden foral mantiene este procedimiento como hasta ahora, sin atender la demanda de muchas familias que pedían que el resultado se obtuviese en base a las familias que voten y no al censo total de familias.

En caso de salir adelante, la jornada propuesta será trasladada al Claustro de profesorado y, para su aprobación, al Consejo Escolar, que deberá aprobarla con el voto favorable de al menos 2/3 (66%) de las personas componentes con derecho a voto. En caso de no obtener este porcentaje, el centro archivará las actuaciones. Terminado el proceso de consultas, Educación dictará resolución estimatoria o desestimatoria al cambio de la jornada escolar. La vigencia del tipo de jornada elegida conforme a lo dispuesto en la nueva orden foral, será indefinida en tanto no se produzca un nuevo inicio de procedimiento de elección.

El 85% de centros públicos y el 25% de concertados tienen jornada continua

El 85% de los colegios públicos (144 de 170) y el 25% de los concertados (13 de 52) tendrán jornada continua en este curso 2023-24 que se iniciará en septiembre. Los últimos centros que este año consiguieron el visto bueno de Educación para cambiar de jornada fueron las escuelas públicas de Amaiur, Arizkun y Burguete y Azpilagaña de Pamplona. Asimismo, los colegios concertados Anunciata y Compañía de María de Tudela ofrecerán la jornada flexible (dos tardes libres), una modalidad que tienen en la actualidad cuatro centros en Navarra.

No obstante, estos 144 centros públicos que tienen jornada continua deberán volver a votarla durante este próximo curso para mantenerla, ya que el proyecto de orden foral propuesto por Educación contempla que en el curso 2024-25 la modalidad de jornada escolar para la totalidad de los centros educativos será la jornada partida. No obstante, todos aquellos colegios que en el curso 2024-25 deseen implantar una modalidad de jornada escolar diferente a la partida deberán concurrir a la convocatoria de elección de jornada escolar, que a tal efecto disponga el departamento de Educación para dicho curso, que será dictada a través de resolución a lo largo del curso 2023/2024.