La llegada de la borrasca Domingos, con rachas de viento de hasta 203 kilómetros por hora y un fuerte temporal marítimo en Galicia, Asturias y Cantabria, dejó ayer tres heridos, dos afectados por la caída de un árbol y otro golpeado por un cable de la iluminación navideña.

El primer accidente se produjo a las 6:30 en Pontevedra, donde un operario que trabajaba en el kilómetro 3 de la carretera EP-2901 tuvo que ser trasladado al Hospital tras quedar inconsciente al caerle un árbol encima.

Poco después, en León, un hombre de 47 años resultó herido tras ser golpeado por el cableado de luces navideñas que se desprendieron por las fuertes rachas de viento. En Oviedo, una mujer resultó herida tras caerle encima un árbol derribado por el viento mientras caminaba por la ciudad. También fue trasladada al Hospital pero no se teme por su vida.

Además, la borrasca ha dejado casi 300 incidencias en Cantabria y un centenar en Galicia, según los servicios de emergencias.

En Cantabria, las dos incidencias más destacadas se produjeron durante la noche del viernes en Castro, donde la caída de un poste de telefonía afectó al suministro en el barrio de Otañes, y en Piélagos, donde el fuerte viento ha provocado problemas en el alumbrado eléctrico. En Galicia, el Centro Integrado de Atención a las Emergencias 112 contabilizó 63 incidencias desde la medianoche, la mayoría relacionadas con problemas en las carreteras.

El viento fue el gran protagonista de la jornada, con rachas muy fuertes en todo el cuadrante noroeste, sobre todo en zonas del litoral gallego y asturiano, así como en los sistemas de montaña y zonas de la meseta. Según Aemet, las rachas de viento alcanzaron los 203 kilómetros por hora en La Rioja, de 161 kilómetros por hora en A Coruña o los 145 km/h en la estación de esquí de La Covatilla (Salamanca). El sistema de frentes asociado a Domingos también dejó precipitaciones especialmente importantes en Galicia, sobre todo en áreas de Pontevedra y A Coruña.

Bajan las temperaturas

Una borrasca que ha afectado también al incendio de Valencia, cuyas hectáreas ascienden a 2.500 y el de personas desalojadas en 850, y solo queda un municipio confinado, Ador. Domingos, como se ha bautizado a esta profunda borrasca atlántica que está afectando a buena parte de Europa occidental, abandonará mañana la península hacia el Mar del Norte, aunque todavía dejará un fuerte temporal marítimo en Galicia y Cantabria e intensas rachas de viento en el norte y este peninsular. Además, según la Aemet, hoy bajarán las temperaturas por debajo de 15 grados en amplias zonas del interior de la península.