El consejero de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, José María Aierdi, ha señalado que el volumen total de residuos en la Comunidad Foral alcanzó en 2022 las 2,7 millones de toneladas anuales, lo que representa un incremento del 16,6 % desde 2012

De este total, el 10 % corresponde a residuos domésticos y comerciales, el 53 % a residuos de construcción y el 31% a residuos industriales, ha detallado Aierdi.

Además, ha destacado el "notable incremento" en la revalorización de los residuos, llegando al 66 %, lo que supone un aumento del 37 % respecto a 2017.

En cuanto a los residuos domésticos y comerciales, 278.000 toneladas en total, se han reducido en un 5 % por habitante. En ese sentido, el consejero ha subrayado la importancia de las medidas de prevención, enfatizando que "el mejor residuo es aquel que no se produce".

Aierdi ha informado de que, en lo relativo a los objetivos de recogida selectiva, se ha alcanzado un 48 %, acercándose al objetivo del 50 % fijado para 2027.

Y respecto al despliegue de la materia orgánica, se ha logrado el 100 % de cobertura en toda la comunidad, pero solo se ha alcanzado un 40 % de la materia orgánica recogida, por lo que "se necesitará un esfuerzo adicional para llegar al 70 % para 2027".

El consejero respondía así en el Parlamento de Navarra a una pregunta del parlamentario del PSN, Carlos Mena, quien ha recordado que "el Plan plantea una revisión de las medidas para analizar su cumplimiento y resultado", y le ha preguntado sobre el estado actual de esa revisión.

Asimismo, ha asegurado que los datos ofrecidos "ponen de manifiesto unos resultados positivos, fruto del compromiso de la sociedad con el reciclaje y la protección del medio ambiente. "La sociedad ha evolucionado en todos los aspectos, también en materia de recogida de residuos", ha celebrado.

Aierdi le ha respondido que "nos encontramos en pleno proceso de revisión, porque es necesario analizar la eficacia de las medidas adoptadas y la evolución de los resultados, y también porque hay que adaptar el plan a las normativas que la Unión Europea ha venido desarrollando con posterioridad y hacer las modificaciones oportunas".

El Plan de Residuos de Navarra 2017-2027, aprobado por el Ejecutivo Foral a finales de 2016, apostó por recoger de forma selectiva el 65 % de los desechos y estimó la creación de alrededor de 350 empleos.

En concreto, propuso una evolución importante en el sistema que pasaría a recoger selectivamente el 65 % de los residuos (biorresiduos y otros materiales como envases, vidrio, etc).

También estableció una disminución de la fracción resto, que pasaría a un 35 %. De ella, después de seleccionar los materiales que se puedan recuperar, el rechazo con destino a vertedero pasaría del 63 % al 25 %.