Koldo Monreal: "Nuestros edificios actúan como una segunda piel que afecta a nuestra salud"

Un paradigma que también repercute de manera directa a escala global, puesto que lucha contra el cambio climático gracias a la reducción en los consumos energéticos.

El director de ONHAUS y autor de ‘El nido que eres’, Koldo Monreal, explica las claves de habitar en una vivienda Low Energy.

¿Qué es el concepto Passiv-haus y qué ventajas tiene?

El Passivhaus es un sello prestacional privado que nace en Alemania en 1990. Su llegada a España es reciente y ha ayudado al sector a conseguir realizar edificios de muy bajo consumo energético o incluso edificios positivos.

Al usuario final, al ciudadano de a pie, lo que realmente le interesa es saber cuales son los parámetros necesarios que le ayuden a distinguir en el mercado inmobiliario de un edificio deficiente a un edificio eficiente. De una vivienda bien construida, de una vivienda con deficiencias, con niveles de confort bajo o peor aún, con patologías.

¿Cuál es su experiencia personal viviendo en una vivienda de este tipo?

Vivo en la primera Low Energy construida en España. Hablar de un edificio de altas prestaciones es hablar de un edificio que te cuida a ti, en lugar de cuidarlo tu a él. Una vivienda donde la calidad del aire, está muy por encima de lo que tenemos hoy en día en nuestros edificios. Donde aspectos como radiación fría/caliente, corrientes de aire, olores, humedades… no existen, y todo ello con un consumo cero o positivo. Entendiendo positivo como un edificio que produce más energía que la que consume, pudiéndola destinar a la carga del coche eléctrico o cualquier otra necesidad.

¿Ha cambiado el concepto que tenemos de vivienda en estas últimas décadas?

Sí, rotundamente sí, al menos en esta comunidad. Hace 10 años nadie preguntaba por los consumos y mantenimiento del edificio, ni si el edificio estaba dotado de ventilación de doble flujo, -para mí totalmente imprescindible- etc . Hoy son aspectos que han tomado una fuerte importancia, y más aún en este último año donde la energía ha tomado un protagonismo importante.

¿Qué herramientas tiene y debe conocer un ciudadano de a pie para poder contribuir a la construcción sostenible?

El ciudadano debe de entender que su mayor contribución va a ser su actitud, y su hacer, y para ello tiene que adquirir cierto conocimiento. Sabemos más de coches que de viviendas. Siendo la compra de la vivienda nuestro desembolso más grande en la vida. ¡¿Pero como es posible esto?! No somos conscientes de lo importante que es para la salud física y mental de nosotros, esta segunda piel que llamamos casa.

Pero además, la construcción de altas prestaciones, cero o positiva, es una realidad, tenemos derecho a ella y debemos exigir a todos los actores que trabajen sobre esta ya.

¿Está diciendo que no todo lo que se construye hoy en día es de altas prestaciones o de consumo nulo, o eficiente?

Para el CTE (código técnico de la edificación), todo lo que cumple normativa es de bajo consumo energético. Y esta relación sabemos que no siempre es así. Todos los edificios de altas prestaciones cumplen el CTE, ¡pero no al contrario! Hoy en día, no se debería de construir un inmueble que no sea de altas prestaciones, eficiente, sostenible y respetuoso. Es una falta de respeto al planeta que nos sustenta y más aún, a nosotros mismos, como seres humanos.

¿Y por qué cree que esta transformación no se está dando de manera rápida?

El sector está en muchos aspectos anclado en el pasado, y aunque es cierto que se están produciendo cambios importantes, aún queda mucho recorrido. Generalizar es siempre injusto, pero en este sector hay demasiados actores de los de “virgencita, virgencita que me quede como estoy”. Vamos, aquellos que no les interesa cambiar ni aprender algo nuevo. Ser vanguardia, es una actitud que requiere trabajo y esfuerzo.

¿En cuánto tiempo veremos una ciudad como Pamplona, que sea completamente sostenible?

Eso es algo más complejo, y nos daría para todo un periódico entero. Tendríamos que empezar describiendo que entendemos por sostenible. Para hablar de la ciudad sostenible, a veces conocida como ciudad circular, debemos introducir otros aspectos como la movilidad, la gestión de residuos, los servicios… No me atrevo a poner un periodo de tiempo, pero sospecho que tardaremos mucho en verlo.

¿Cómo puede influir a nivel personal y social la transformación de nuestra vivienda?

Ya hemos comentado antes, nuestros edificios, actúan como una segunda piel que nos afecta a nuestra salud. Pongamos un ejemplo: nuestro cuerpo para tener un descanso reparador en nuestras horas de sueño, necesita oxígeno. Si dormimos en una habitación con ventilación de doble flujo, conseguiremos mantener los niveles de Co2 bajos, y los niveles de oxígeno estables, favoreciendo de esta manera nuestro descanso. ¡Y persona bien descansada vale por dos! Este es un solo ejemplo de los muchos que aportan estas viviendas de altas prestaciones.

¿Qué consejos le daría a una persona que quiere comprar su primera vivienda?

Que lea el libro ‘El nido que eres’ antes de comprar o incluso rehabilitar su vivienda. Es más, me atrevería a decir, alquilar.

¿Cuáles son los aspectos que quiere destacar en ‘El nido que eres’?

El libro tiene una doble lectura. Por una parte es un libro donde se marcan esos aspectos mínimos que debería tener un inmueble para poder ser considerado un edificio de bajo consumo y saludable. No quedándonos en las palabras, sino aportando números que nos ayuden a comparar y exigir que es lo que realmente queremos. Y por otra parte, no menos importante, hay un llamamiento al sector de la construcción a tener un cambio de actitud, yo diría que incluso ético o cultural, hacia el buen trabajo. Necesitamos como dice el Arquitecto y Economista, Patxi Mangado: “Hay que hacer buena arquitectura”, y yo continuo, “y ejecutarla bien”.

¿Con qué finalidad has escrito tu libro? ¿A qué público se dirige?

El libro va dirigido principalmente a toda persona que se quiera comprar, hacer o rehabilitar su vivienda. Es un libro para acercar al usuario de la vivienda un conocimiento básico de construcción, suficiente para separar el grano de la paja. Es más, hay todo un capítulo destinado a este fin, que como no podía ser menos, lleva por título “El lazarillo”, haciendo un guiño al Lazarillo de Tormes. Esa picaresca española de total actualidad hoy en día.