Pamplona atrae a miles de estudiantes universitarios anualmente y se caracteriza por su vitalidad y prosperidad como ciudad. Entre los barrios que mejor encapsulan la atmósfera universitaria se encuentra Iturrama.

Vivienda en alquiler en Iturrama. cedida

¿A qué se debe la alta demanda de alquileres en este barrio? La respuesta es sencilla: ubicación, por su cercanía a la Universidad de Navarra, y comodidad. Para los estudiantes supone un lujo vivir entre 5 y 15 minutos caminando de su centro de estudios. Y si este paseo es por una zona donde reina la buena convivencia, gana doble. Como resultado, Iturrama se convirtió hace ya años en un motor económico para la ciudad: se abrieron bares y restaurantes, comercios locales, bibliotecas, centros y academias de estudio, gimnasios… Mejorando la vida de ya no sólo estudiantes, sino también de las familias que llevan viviendo toda la vida en la zona y que ahora disfrutan de muchos más servicios.

Pero, ¿es realmente tan sencillo adaptarse a la convivencia con jóvenes universitarios? En este caso depende de quién esté detrás de la gestión del alquiler con los estudiantes. Y aquí entra CampusHome: es la empresa líder en Navarra en alojamientos de estudiantes y tiene un modelo único de gestión. Como explica Nicolás Iribas, directivo de la empresa, “nació en un momento donde los estudiantes tenían dos opciones: Colegio Mayor o un piso de estudiantes con alquiler tradicional y sin supervisión. Este último suponía interminables problemas para propietarios y vecinos.”

Tras más de 30 años gestionando alojamientos para universitarios, CampusHome se ha convertido en la opción favorita para propietarios y estudiantes ya que consigue ofrecer calidad a ambas partes y garantizan la convivencia para el vecindario.

El equipo, integrado por más de 200 trabajadores, invierte más de 600 horas anuales a cada vivienda: con su gestión integral asume todo el mantenimiento, garantiza el cobro de la renta y presta un servicio de constante presencia en las viviendas (limpieza diaria, lavado y planchado, cocina, supervisión, gestión vecinal…). De esta forma, consiguen garantizar que los inquilinos pueden centrarse en sus estudios y los propietarios tengan la seguridad de que su piso está en buenas manos.

Iribas explica que “para generar un clima de convivencia sostenible y que perdure en el tiempo es imprescindible darle un enfoque profesionalizado. En el alquiler tradicional, es el arrendador el que tiene que invertir tiempo y asumir los riesgos cuando en realidad no es un profesional del alquiler, ni quiere serlo. Al final, quieres que te gestionen los cobros, los arreglos, gestionar quejas con vecinos, estar al día con la legislación, y un largo etcétera”.

En Iturrama se ha conseguido que fluya la buena convivencia entre estudiantes y vecinos. Convivir con estudiantes es positivo si viven en un entorno con control. Así viven sus más de 1.400 residentes, distribuidos en más de 400 pisos: todos ellos son seleccionados por el equipo de CampusHome y cuentan con instalaciones adicionales a sus alojamientos para que puedan compartir espacios de ocio y completar su formación académica, todo bajo la supervisión del equipo. Además, la empresa organiza cada semana viajes y actividades para que conozcan la cultura y naturaleza navarras, con el objetivo de generar un ocio saludable.

Protegen al propietario frente a los impagos y al desconocimiento de los inquilinos: todos ellos son estudiantes de la Universidad de Navarra que viven bajo supervisión profesional.

Asesoran de manera personalizada a cada propietario y mantienen un alquiler sostenible en el tiempo.

Se encargan totalmente del cuidado y mantenimiento del piso, así como de su adecuación y mejora del mobiliario.

La filosofía de alquiler responsable también tiene en cuenta a los vecinos: cuidan la convivencia vecinal y la calidad del clima con los clientes.

Seguro gratuito de responsabilidad civil.

No cobran ninguna comisión al propietario.