‘Bake Off: Famosos al horno’ ya tiene a sus cinco finalistas, sin embargo, durante las diferentes pruebas de la noche ha habido tiempo para todo, incluso para algún que otro regalo entre los concursantes con segundas intenciones

En la segunda prueba, Blas Cantó contaba con una importante ventaja respecto a sus compañeros tras haberse alzado como mejor pastelero la semana pasada. 

El cantante se llevaba de nuevo la pasada semana el delantal azul y con él, además de librarse de la expulsión, contaba con una ventaja en la prueba técnica: conocer las cantidades exactas de al menos cuatro ingredientes de la tarta ‘red velvet’ que debían realizar los concursantes, una ayuda extra que podía quedarse para él o cedérsela a un compañero

EL REGALO ‘ENVENENADO’ DE BLAS CANTÓ A PABLO PUYOL

Blas Cantó no tardó en tomar una decisión y ceder su ventaja a su compañero Pablo Puyol, mientras Paula Vázquez, la presentadora del programa, le preguntaba por los motivos de su decisión. 

Se la cedo a él porque yo me siento mal de tener la receta yo y no mis compañeros, así que se sienta mal él”, decía el murciano entre las risas de sus compañeros por las razones que estaba argumentando.

Pablo Puyol era el primero en reaccionar destacando que “ahora me van a mirar con lupa”, diciendo a Cantó que era un ‘regalo’ que le podía jugar en contra y añadía: “Tengo un dato que yo no quería tener. Me gusta que todo sea igualitario y nadie tenga ventaja”, aseguraba el actor.

Mientras los concursantes realizaban sus postres, el jurado debatía sobre las verdaderas razones de Blas Cantó para ceder su ventaja a su compañero, aunque fue el propio cantante el que terminó sacándoles de dudas

Cantó desvelaba más tarde sus verdaderos motivos para rechazar quedarse con la ventaja: “Prefiero que lo tenga otro. Al final me van a exigir más a mí y me voy a sentir mal, así que prefiero que lo tenga otro”, confesaba Blas.