BARCELONA. El juez de la Audiencia Nacional que indaga los atentados terroristas del 17A en Catalunya ha rechazado investigar la supuesta vinculación del imán de Ripoll (Girona), considerado presunto cerebro de los ataques, con el CNI, como solicitaba una acusación particular.

En un auto, al que ha tenido acceso Efe, el titular del juzgado central de instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, José Luis Calama, concluye que no procede practicar las diligencias de investigación solicitadas por Francisco Javier Martínez, padre de un menor fallecido en los ataques que ejerce la acusación particular en la causa.

El abogado de esta acusación particular, Jaume Alonso-Cuevillas, ha anunciado a Efe que recurrirá la decisión del juez de no practicar las diligencias solicitadas, entre las que figuraba la testifical de los agentes policiales que se entrevistaron con el imán de Ripoll entre 2012 y 2014, cuando estuvo en prisión en Castellón por delitos relacionados con el narcotráfico.

En su auto, el magistrado hace "íntegramente" suyos los argumentos de la Fiscalía, que se opuso a indagar la relación del imán Abdelbaki Es Satty con el CNI, con el argumento de que ello excedía el ámbito de investigación de la causa de los atentados y que no se había puesto de manifiesto ningún indicio que apuntara a esos vínculos.

En su escrito, asumido por el juez instructor, la Fiscalía razonaba también que los movimientos de la célula que atentó en las Ramblas se han ido "recomponiendo con la información obtenida de la cooperación internacional" y del análisis de los correos intervenidos.

También aduce la Fiscalía que las posibles vinculaciones de la célula con el terrorismo yihadista ya han sido investigadas por los Mossos d'Esquadra, en unas pesquisas que, destaca el escrito del ministerio público, se han llevado a cabo "con rigor y esfuerzo" para determinar la responsabilidad criminal de los procesados y de "terceras personas" que hubieran podido colaborar con ellos.

Entre las diligencias rechazadas, figura la declaración del subdirector general de Instituciones Penitenciarias, una pesquisa que la Fiscalía cree innecesaria puesto que ya consta su respuesta sobre las entrevistas policiales realizadas al imán de Ripoll, en cuatro ocasiones, entre 2012 y 2014, en la cárcel.

La Fiscalía también se opuso a la declaración testifical de esos agentes, al entender que sus entrevistas con el imán se enmarcaban en la labor de investigación de los cuerpos y fuerzas de seguridad "en el cometido que les es encomendado en la prevención de delitos graves" y tuvieron lugar en un período temporal en el que no consta que se hubiera formado el grupo terrorista que atentó en Catalunya.