La presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, se ha unido a la petición unánime que realizó el Parlamento de Navarra para pedir una investigación que permita esclarecer la muerte de Mikel Zabalza en 1985, tras hacerse públicos unos audios que apuntan a que murió torturado en Intxaurrondo tras ser detenido por la Guardia Civil.En respuesta a una pregunta de Geroa Bai en el pleno del Parlamento de Navarra sobre este asunto, Chivite ha afirmado que "el Gobierno hace suya la declaración aprobada por unanimidad en esta Cámara, reflejo del sentir de los navarros, y el Gobierno no puede sino sumarse y compartir este pensamiento".

Chivite ha afirmado que "nuestra obligación de comprometernos con rotundidad con la defensa de las víctimas del terrorismo, con las víctimas de cualquier tipo de violencia o vulneración de derechos humanos, con la investigación, la justicia, le reparación y la verdad, que era el objetivo de la declaración".

La jefa del Ejecutivo ha destacado que la unanimidad conseguida en este tema es "un buen ejemplo de cómo trabajar todo lo que tiene que ver con materia de víctimas". "Por eso apelo a que trabajemos todos en pro de ese consenso, en pro de lo que atañe a la memoria democrática y a la memoria histórica, porque será la mejor manera de abordar una materia creo que altamente sensible para la ciudadanía y ante la que nadie puede ni debe ponerse de perfil. Trabajemos por la convivencia, por la memoria, desde el consenso, porque solo así podremos avanzar como sociedad y mejorar la calidad democrática de las instituciones", ha afirmado.

La portavoz de Geroa Bai, Uxue Barkos, ha afirmado que a la familia de Mikel Zabalza "se le ha negado durante más de 35 años la verdad, la justicia y la reparación". "Después de haber visto arrebatada la vida de su hijo y hermano, después de haber recibido un trato desaprensivo en la búsqueda de explicaciones en el momento de la desaparición, después de haber vivido la incapacidad de los tribunales en demostrar lo que la certeza moral apuntaba claramente, existe una deuda con la familia Zabalza y con el conjunto de la sociedad de Navarra. Con los audios conocidos existe un punto de inflexión, audios que señalan que murió torturado. Existe verdad y toca ahora justicia y reparación", ha afirmado.