PAMPLONA. Investigadores de la Universidad de Navarra están desarrollando un novedoso sistema de climatización que permite calentar o enfriar una habitación sin usar refrigerantes, cuyo prototipo se ha probado ya en la base antártica española Gabriel de Castilla.

El nuevo sistema, que está siendo financiado por el Gobierno de Navarra mediante fondos FEDER de la Unión Europea, utiliza las llamadas "células Peltier", un dispositivo plano, recubierto de cerámica, con semiconductores en su interior.

En esta célula, al paso de una corriente eléctrica, una de las caras se calienta y la otra se enfría y, al invertir la polaridad, las caras se comportan en sentido contrario, lo que permitiría subir o bajar la temperatura de una habitación sin necesidad de tener un aparato de aire acondicionado o radiadores.

Las "células Peltier", que deben su nombre al científico francés que las inventó, se conocen desde hace tiempo y se utilizan sobre todo en aeronáutica e industria aeroespoacial, aunque ahora la Universidad de Navarra, junto a la constructora Grupo ACR, están estudiando su aplicación en el sector inmobiliario a medio-largo plazo.

Si el proyecto es viable, se podría colocar en una vivienda como sistema de climatización sin necesidad de instalar caldera de calefacción, tuberías, radiadores o bombas de calor. Además, se prevé alimentar el sistema con energía fotovoltaica desde la misma fachada del edificio, por lo que el consumo de electricidad de la red general sería nulo.

Un prototipo de este sistema, a una escala reducida, del tamaño aproximado de un arcón congelador, se ha enviado, con la colaboración del Ejército español, a la base española en la Antártida, donde los propios militares se han encargado de testar el aparato, que fue colocado a la intemperie para comprobar su comportamiento en un entorno de frío extremo.

También está previsto enviar un prototipo a Israel para probar el aparato en condiciones de altas temperaturas.

Poder probar el sistema en la Antártida "representa una gran oportunidad. Por un lado, porque supone formar parte de la tecnología puntera que recala en una base científica tan importante para aprovechar unas condiciones extremas que serían muy difíciles de emular en cualquier ensayo", ha explicado María Ibáñez Puy, responsable del proyecto por parte de ACR.

Por otra parte, ha agregado, "representa un importante espaldarazo para un proyecto muy relevante en nuestro grupo y en su apuesta por la I+D como una seña de identidad".

César Martín-Gómez, investigador responsable del proyecto y profesor de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Navarra, ha asegurado que los graves problemas a los que se enfrentan las ciudades del siglo XXI no se pueden resolver solo con soluciones convencionales.

"Ojalá que este proyecto, en el que llevamos embarcados desde 2010, y que pretende eliminar el uso de fluidos refrigerantes utilizando solo energía fotovoltaica renovable, sea un paso en la dirección que la sociedad nos está demandando hoy en día", ha declarado.

El proyecto, que se denomina "Módulo de fachada industrializado, autónomo y activo para climatización", tiene un presupuesto superior a 310.000 euros y todos sus componentes han sido suministrados por empresas navarras.