tafalla - “El colegio está al lado del río, el agua entró con mucha potencia y provocó un gran destrozo”, suspira Jon Mendizábal, el director de Escolapios en Tafalla. La escuela padeció el impacto del desastre natural de hace ocho días y quedó destrozada en gran parte.
El centro educativo está compuesto por dos edificios -además de las instalaciones deportivas- en los que los jóvenes reciben las clases durante el periodo lectivo. El que aloja a los alumnos de Educación Infantil se sitúa a más de 150 metros de distancia del río por lo que la afección que acarrea por la inundación es mínima. No corrió la misma suerte el bloque de los estudiantes de Educación Primaria y Secundaria. Este último está construido muy cerca del río, una ubicación que lo ha convertido en el gran perjudicado. “Los bajos están muy dañados, todo lo que está al mismo nivel del río ha recibido un mínimo de metro y medio de agua”, puntualiza.
Los 585 alumnos matriculados en el colegio de Escolapios tendrán que comenzar en septiembre un nuevo curso algo diferente. La escuela no estará preparada al cien por cien, como es habitual, para inicio del periodo académico. “No vamos a empezar en condiciones normales, el curso va a comenzar en precario”, revela Mendizábal. Pero matiza y añade que las clases están intactas puesto que ninguna se encuentra en la planta baja sino que todas están en pisos superiores donde la inundación no ha llegado.
el patio y el frontón Las áreas más afectadas se encuentran edificadas a ojos del río. El patio principal ha sido uno de los lugares más dañados por la fuerza que llevaba la riada consigo. Los muros que lo revestían fueron derribados, al igual que las paredes que lo separaban del exterior. “Todas las estructuras que delimitaban el patio se han venido abajo y el huerto solar que era de los alumnos y de la escuela también se ha deshecho”, agregó. Las labores de limpieza de los propios profesores y las tareas de las brigadas de voluntarios han conseguido adecentar parte del desastre pero, a pesar de ello, queda un arduo trabajo por delante. “Llevamos una semana intentando rehabilitarlo en la medida de lo posible pero nos va a costar que todo vuelva a la normalidad”, estimó. Y continuó: “El patio tendrá que estar delimitado por vallas como sustitución a los muros derruidos; tenemos que ir viendo y analizando la situación, lo esperado es que vayamos rehabilitando a lo largo del curso que viene”.
Como el resto de instalaciones a pie de calle, el frontón quedó cubierto de barro y agua, llegando a superar el metro de altura.
La prisa le pisa los talones al colegio. La infraestructura de Escolapios sirve de escenario principal para las actividades infantiles durante las fiestas patronales de Tafalla, que comienzan el próximo 14 de agosto. El patio del centro es uno de los espacios más concurridos por los pequeños durante los festejos de verano por lo que, con premura, se deberá adecentar el entorno.
petición a la ue La europarlamentaria Idoia Villanueva reclamó en Bruselas la petición de que se active el fondo de solidaridad de la Unión Europea para hacer frente a los daños de las inundaciones en Tafalla y los trece municipios de la Zona Media navarra. La eurodiputada navarra de Unidas Podemos registró una batería de preguntas para que los organismos comunitarios se impliquen en la reconstrucción de los daños que causaron las inundaciones del pasado día ocho. “Europa creó un fondo de solidaridad para casos de catástrofes naturales. Solicitamos al gobierno del PSOE declarar lo antes posible zona catastrófica a Navarra y también solicitamos en Europa medios para auxiliar ante las actuales pérdidas, las labores de limpieza, reconstrucción y otros tipos de soporte a los ciudadanos y comarcas afectadas”, dijo.
Valoración de la zona. La consejera en funciones de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Isabel Elizalde, visitó ayer la zona afectada por las graves inundaciones provocadas por la avenida torrencial del río Cidacos. La intención era la de conocer ‘in situ’ los daños producidos en las infraestructuras agrarias y las afecciones en los barrancos de las localidades del área. En su recorrido, Elizalde visitó Beire, Pitillas y Tafalla. También estuvo en la estación de viticultura y enología Evena en Olite, cuyas instalaciones resultaron afectadas y están siendo reacondicionadas. El equipo del Departamento recorrió la zona afectada con el fin de poder realizar en breve una primera valoración de los daños y diseñar del modo más preciso posible las líneas de ayuda que se habiliten al efecto.
