PAMPLONA. La Policía Nacional, en una operación conjunta con Policía Foral, ha desarticulado una organización criminal dedicada a estafar a empresas mediante el método denominado 'Man in the middle'. Han sido detenidas dos personas que habrían logrado obtener beneficios superiores a los 100.000 euros tras estafar a las compañías.

La investigación policial se inició a raíz de la denuncia interpuesta por una empresa de Pamplona, la cual recibió un correo electrónico, que aparentemente provenía de uno de sus proveedores, en el que se facilitaba un nuevo número de cuenta bancaria para el pago de las facturas pendientes.

Transcurridos unos meses sin recibir el pago, el verdadero proveedor contactó con la empresa, momento en el que se percataron de que el dinero había sido ingresado en una cuenta bancaria desconocida para el proveedor y que la empresa había sido víctima de una estafa.

Posteriormente, se recibieron en las oficinas de ambos cuerpos policiales hasta seis denuncias en total por hechos similares que, a raíz de la desarticulación de este grupo criminal, han sido esclarecidos, ha explicado la Policía Nacional en un comunicado.

Estos hechos se enmarcan dentro de la estafa conocida en el argot policial como 'Man in the middle' que consiste en que a través de ingeniería social y ataques informáticos, los delincuentes consiguen información comercial de grandes y medianas empresas.

Una vez obtienen la relación de proveedores, se "interponen" (de ahí el nombre de la estafa ) entre el proveedor y la empresa víctima, suplantando la identidad del primero.

Posteriormente, envían un correo electrónico en el que solicitan el cambio de cuenta bancaria para el pago de las facturas pendientes. La empresa realiza el pago a la nueva cuenta, y es semanas después, cuando el proveedor le reclama nuevamente el pago, cuando detectan que han sido víctima de la estafa.

La Policía Nacional ha remarcado que en estos casos es importante la prevención y ha recomendado dudar de correos provenientes supuestamente de empresas en las que piden un cambio en la cuenta en la que se realizan los pagos.

En este sentido, se aconseja verificar la dirección del remitente, pues en muchas ocasiones suelen ser casi idénticas a las del proveedor salvo por alguna letra, punto o como que no es percibido por la víctima.

Además, es conveniente antes de realizar un pago, contactar por otros medios con la empresa proveedora para cerciorarse de que el cambio que solicitan es correcto.

Asimismo, la Policía Nacional recuerda la importancia de revisar las transacciones relevantes y denunciar los hechos en el menor tiempo posible, dado que cabe la posibilidad de recuperar el dinero, si la transferencia es paralizada. Para ello, no debe transcurrir mucho tiempo desde que se realiza la transferencia hasta la detección de la estafa y la denuncia de los hechos.

La Policía Nacional y la Policía Foral han detenido a dos personas en el marco de esta operación y han detenido a una tercera, que no ha sido arrestada. La investigación sigue abierta.