Bilbao - El primer fallecimiento por coronavirus en la CAV se produjo ayer en Bizkaia. El departamento de Salud informó a media tarde de ayer de la muerte de un paciente de 82 años que había dado positivo en COVID-19. "Esta persona, con enfermedades crónicas, tenía una neumonía y su positivo se ha confirmado hoy mismo (por ayer)", indicó en un comunicado el Gobierno vasco.

La noticia vino asociada a un nuevo aumento de positivos detectados en la CAV. Si por la mañana la consejera de Salud, Nekane Murga, informó de 17 casos positivos, por la tarde los afectados subieron a 21: 16 en Araba, dos en Gipuzkoa y tres en Bizkaia. De ellos, catorce permanecen en seguimiento domiciliario y los siete restantes permanecen ingresados en los hospitales de Txagorritxu, Donostia y Cruces, uno de ellas en UCI.

En Araba, el territorio más afectado, fueron detectados tres positivos más, por lo que ya son 16 las personas con coronavirus, de los cuales cinco siguen hospitalizados, uno de ellos grave por otras patologías.

En Bizkaia tres nuevos pacientes engrosaron las cifras, siendo la última notificación la del hombre de avanzada edad, con enfermedades crónicas, que falleció tras dar positivo. En este territorio, una persona sigue hospitalizada y a la otra le realizan seguimiento domiciliario.

En Gipuzkoa no hubo novedades y mantiene uno de los dos casos detectados también ingresado.

Origen desconocido Se da la circunstancia de que de los ocho nuevos positivos detectados ayer, hay dos -uno de Bizkaia y otro de Araba- de los que se desconoce cuál es el origen de la infección, una de las situaciones que más preocupan a las autoridades médicas.

Murga compareció ayer con el responsable de Vigilancia Epidemiológica y Vacunas, Txema Arteagoitia, para desgranar la evolución de la epidemia en Euskadi. Los responsables sanitarios desvelaron que 250 personas permanecen en aislamiento y en situación de vigilancia sanitaria en sus domicilios por haber permanecido en contacto con pacientes contagiados por el COVID-19. Un colectivo del que más de un centenar son profesionales sanitarios. Unas bajas en la red de salud vasca que, según la consejera, no afecta "al servicio médico, que se está manteniendo en todas las áreas porque los casos son puntuales". Además el departamento de Salud tomó la decisión de anular algunas pruebas y consultas no urgentes y "demorables".

Estas medidas iniciales suponen que, por el momento, no sea necesario contratar a más médicos, ya que la ausencia de los que están de baja o aislados en sus domicilios -algunos terminaron ayer la cuarentena- se "suple" con estas acciones, aunque la consejera no cerró la puerta a hacer contrataciones en el futuro. Por eso, concretó Murga, Osakidetza está en condiciones de seguir prestando una asistencia "de calidad" en todos sus hospitales y centros de salud.

La responsable de Salud recordó que está abierto el procedimiento para incorporar a doce nuevos facultativos al Servicio de Vigilancia Epidemiológica de Salud Pública y rechazó que exista una situación de "urgencia" de personal. Arteagoitia apoyó a la consejera y alabó el Servicio de Vigilancia Epidemiológica, que afronta un "reto terrible", y que lo está haciendo "muy bien".

Arteagoitia también informó de que de las 176 pruebas realizadas para detectar coronavirus, solo 17 dieron positivo, aunque en ocasiones a una misma persona le han practicado varias pruebas para ratificar o descartar el diagnóstico. Arteagoitia reveló que de las 176 pruebas "todavía quedan bastantes pendientes" y especificó que "de todas los casos confirmados se hace una evaluación exhaustiva de sus contactos, de las personas que conviven con ellos, que trabajen o con las que hayan tenido relaciones en los últimos catorce días".

Murga incidió en la transcendencia que tienen las medidas de prevención entre los profesionales sanitarios para cortar la sangría que padece el colectivo, pero también entre los enfermos crónicos y las personas mayores, tanto los que viven en sus casas como aquellas que son atendidas en residencias.

Por lo que respecta al resto del Estado el conteo de positivos de coronavirus coninúa in crescendo. Según explicó el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, hasta las 18.00 horas de ayer estaban contabilizados 200 casos de coronavirus, tres de ellos en niños. Siete pacientes siguen en la UCI, catorce son profesionales sanitarios, uno más que el martes, y otros catorce siguen sin tener un origen identificado. El número de casos creció por la tarde en cinco más con respecto a los datos de la mañana, destacando un paciente en Galicia, el primero en esa comunidad autónoma, y cuatro positivos más en La Rioja.

El principal incremento se produjo en Madrid, donde fueron diagnosticado 21 positivos desde la última actualización del martes. Así, la región madrileña cuenta con setenta infectados. Sobre el aumento constante en el número de casos, Simón especificó que el incremento no significa que haya aumentado el riesgo de transmisión, sino que puede deberse a que la detección de casos y los sistemas de vigilancia mejoran en algunas comunidades autónomas. "Esto permite detectar casos, en su mayoría leves, que a lo mejor hubiéramos tardado más en detectarlo sin la mejora de los sistemas", refirió. Simón insistió en que Madrid está "haciendo un esfuerzo enorme" en la detección de casos y que por ello "quizás" presenta más casos que el resto.

Sobre el fallecido por el COVID-19 en Valencia del que se tuvo conocimiento el martes, el director de Alertas y Emergencias explicó que "en principio no ha transmitido el virus a ninguna persona y es un caso importado. Eso nos puede tranquilizar".