Navarra registró ayer 593 nuevos casos positivos de infección por covid-19, según los datos facilitados por el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN), tras realizar en el sistema público de salud 3.651 pruebas por PCR y por test de antígenos, con un 16,2% de positivos.

En la jornada de ayer, en los hospitales navarros, se produjeron 31 nuevos ingresos relacionados con esta enfermedad, dos de ellos en la UCI. También se registraron dos fallecimientos por covid-19, dos hombres de 79 y 82 años. El número total de muertes por esta causa se sitúa, por tanto, en 666.

Por zonas, en Pamplona / Iruña y Comarca se registra el 64% de los positivos, el área de Tudela tiene el 6%, y a la de Estella-Lizarra pertenecen el 9% de los casos. El resto de positivos (21%) se reparten por otras zonas de Navarra.

En cuanto a la distribución de los casos registrados por franjas de edad, los grupos mayoritarios son el de 45 a 59 años, con el 28%, y el grupo de 15 a 29 años con un 19% del total. A continuación, está el grupo de menores de 30 a 44 años con un 18%; le sigue el grupo de menores de 15 años con un 15% y el de 60 a 75 años con un 14%; y, finalmente, el de mayores de 75 años, con el 6%. La edad media de los nuevos casos se sitúa en 41 años.

Respecto al género, los casos se reparten por igual entre hombres y mujeres, con el 50% cada grupo.

En la red hospitalaria de Navarra permanecen 330 personas ingresadas con covid-19 (16 más que ayer), 44 de las cuales se encuentran en puestos UCI (seis más que ayer) y otras 50 en hospitalización domiciliaria. Los demás, 236 pacientes, están en planta. Todas estas personas dieron positivo en una prueba PCR, sea esta infección o no el motivo de su ingreso hospitalario y ocupan espacios covid-19.

En cuanto a la incidencia acumulada de infecciones por el virus, según los reportes diarios, se sitúa en 26.941.

Ansoáin fue la zona de salud que más positivos acumuló, un total de 30. El área de Pamplona volvió a ser la que más incidencia arrojó, con hasta 15 zonas más por encima de los 20 positivos.

La hostelería

La argumentación del cierre de la hostelería quizá era la más esperada y la más difícil de explicar por parte del Gobierno foral. En la rueda de prensa de ayer tras la sesión del Ejecutivo, el vicepresidente, Javier Remírez, avanzó que han constatado que "en la hostelería la gente se relaja. Por eso nos parece una buena medida el cierre". Bajo esta premisa, en la orden foral el Gobierno argumenta que los establecimientos constituyen un espacio principal de relación social en el que se dan "factores de riesgo más elevados" que en otros lugares o actividades. Pero también utiliza datos objetivos. Para ello echa mano del informe del Instituto de Salud Pública en el que se constata que entre el 14 y el 19 de octubre el equipo de rastreo detectó 22 brotes en restaurantes y bares. En concreto, según se recoge en el texto, en 19 brotes una o más personas se habrían contagiado en "restaurantes y bares" y en 3 brotes una o más personas indicaban el contagio en "restaurantes y bares y reuniones de familiares amigos". Por otra parte, en 59 brotes se incluía el término "reuniones de familiares y amigos" y en 4, "viajes vacacionales".En la orden foral también se alega que los bares y restaurantes "están relacionados con la no utilización de la mascarilla durante todo el tiempo o la mayoría del tiempo", así como con no mantener la distancia de seguridad "durante un tiempo bastante relevante". "El consumo de alcohol también repercute en el comportamiento de las personas, relajando las medidas de seguridad", sostiene la norma.

No obstante, Remírez reconoció ayer los costes que va a tener para el sector hostelero el cierre, por lo que recordó que el Gobierno va a aprobar una partida de ayudas de 10 millones de euros para paliar los costes del sector, una cifra que, señaló, llega a los 15 con otras ayudas previas y a la que habría que sumar las prestaciones por ERTE y a autónomos. "Nosotros seguimos creyendo que cerrar la hostelería es una medida costosa para el sector, pero que va a tener efectos positivos en la lucha contra la pandemia", expuso el vicepresidente, para indicar que "tenemos un diálogo abierto con el sector, con medidas que se suman a otras ayudas del pasado".

Sobre la limitación del reparto de comida a las 21:00 horas, Remírez apuntó que es una medida que se establece "por la concentración de personas en los domicilios". "Hemos limitado todo a las 21.00 horas para que no se produzcan reuniones en domicilios o cenas. La salud pública prima por encima de todo", subrayó el vicepresidente.