Las manos que cuidan del Helvetia
asobal | elisa arrechea pasa de jugar a balonmano a ser una de las fisios del anaitasuna
pamplona - Hace diez años, cuando jugaba al balonmano, sufrió una de las lesiones más temidas por los deportistas: rotura del ligamento cruzado anterior y menisco interno. El período de recuperación supuso un auténtico suplicio para Elisa Arrechea así que, cuando se recuperó, supo que su vida profesional iría encaminada a intentar ayudar a los demás. “Antes de lesionarme ya lo tenía en mente, pero sufrí tanto con la rehabilitación y vi que al final tenía su recompensa, que pensé en que yo también quería curar a la gente y ayudar”, recuerda.
Ahora, unos cuantos años después, esta joven de Elizondo de 26 años se ha convertido en una de las fisioterapeutas del Helvetia Anaitasuna. Junto a Pablo Inchauspe, se encarga de cuidar y mimar a sus jugadores, de evitar que acaben sufriendo lesiones mayores y de tratar las molestias que puedan presentar. Es la única mujer en un entorno masculino, algo a lo que ya se ha acostumbrado y que cada vez lo sobrelleva con mayor naturalidad. “Al principio sí que pasaba muchísima vergüenza y ahora hay días que todavía paso, pero me han acogido muy bien y eso ayuda. Yo ya conocía a Carlos Chocarro y a Ibai Meoki, y eso me ha facilitado bastante el integrarme en el grupo”, asegura.
también con la base El primer contacto de Elisa Arrechea con Anaitasuna fue precisamente por mediación del extremo lerinés. En Semana Santa, el club organiza un torneo de balonmano base, para el cual necesitaban una fisioterapeuta. “Se quedaron sin fisio y Chocarro se acordó de mí, ya que por entonces yo jugaba en el Beti Onak con su novia, Silvia Lima. Me dijo a ver si me interesaría y acabé entrando. Estuve tres días muy a gusto y creo que también ellos se quedaron contentos con mi trabajo”, recuerda.
Su buena labor hizo que Anaitasuna quisiera contar con ella para que fuese la fisioterapeuta de la base, una alegría que aún fue mayor cuando a finales de julio le plantearon también trabajar con la plantilla de Asobal. Elisa Arrechea recuerda que, tras recibir la noticia, “llegué a Elizondo y lo celebré por todo lo alto con mis amigas. Saqué champán incluso para todo el mundo. Estaba muy contenta, ni me lo creía. Antes iba a animarlos lo que podía y ahora he pasado de ver los partidos en la grada a convivir con ellos y tratarlos de tú a tú”.
La elizondarra compagina ahora su labor en la base con la primera plantilla y, por el momento, la experiencia no puede ser más gratificante. “Está siendo muy buena. Estoy muy contenta y me tratan muy bien. Sí que es verdad que me vacilan bastante, algo normal porque soy la única chica del equipo, y encima yo soy superinocente y pico en todas las bromas, pero me cuidan y me miman bien. Y los fisios a ellos también, ¿eh?”, destaca.
Su condición de mujer en el mundo del balonmano masculino, salvo alguna anécdota puntual, no le ha supuesto ningún problema para desarrollar su labor y, a la hora de saltar a la pista a asistir a algún jugador, Elisa Arrechea intenta hacerlo lo más “concentrada” posible. “Sí que paso muchos nervios al entrar, más que nada por si sufren algo grave... Pero intento hacerlo muy rápido, cuando el árbitro me da paso, y la verdad es que no oigo nada”.
Ante polémicas como la designación de Gala León como capitana de la Copa Davis, que no ha gustado a ciertas personas, Elisa Arrechea lo tiene claro. “Yo siempre he tenido entrenadores chicos. Si estábamos en el vestuario, los entrenadores esperaban a que nos cambiáramos y luego entraban. De hecho, cuando se están cambiando espero a que terminen y luego entro a hacer los vendajes o lo que sea. Y todo tan normal”, sostiene.
Ahora su objetivo, como buena fisioterapeuta, es que la temporada termine “sin lesiones” graves y, a nivel deportivo, “estar en Europa”. “Hay que trabajar mucho, pero si se hacen las cosas bien como se están haciendo, se irá logrando”, concluye.
Dedicada al balonmano. Elisa Arrechea Urrutia (Elizondo, 16/11/1987) empezó a jugar en el Baztango. También ha pasado por el equipo femenino del Grupo Pinta Torrelavega, el Sporting La Rioja, el Itxako y, el año pasado, puso fin a su etapa en activo en el Beti Onak.
Con Pablo Inchauspe. Elisa es una de las fisios del equipo junto con Pablo Inchauspe.
“He pasado de ver los partidos desde la grada a convivir con ellos y tratarles de tú a tú”
“Me han acogido muy bien en el equipo, aunque sí me vacilan bastante, algo normal”
elisa arrechea
Fisioterapeuta del Helvetia Anaitasuna