HELVETIA ANAITASUNA 39

VALLADOLID 35


Helvetia Anaitasuna (18+21) Juan Bar (portero), Gastón (3, 1p), Edu Fernández (2), Torriko (8, 2p), Aitor García (2), Adrián Ortiz (3) y Pablo Itoiz (1) –siete inicial–. También jugaron Bazán, Xavi González (7, 3p), Josu Arzoz (2), Aitor Albizu (11, 1p), Bonanno y Ganuza.

Recoletas Atl. Valladolid (11+24) Nagy (portero), Álvaro Martínez (8), Robert, Miguel Camino (4), Manu García, Toledo (3) y Dimitrievski (6, 1p) –siete inicial–. También jugaron Fuentes (portero), Freitas (2), Afonso (2), Miguel Martínez (3), Dimitrioski (4, 2p) y Edu Calle (3, 2p). 

Marcador cada cinco minutos 3-2, 7-3, 9-7, 12-8, 15-10, 18-11 (descanso); 22-15, 26-17, 30-22, 34-27, 36-30 y 39-35.

Árbitros Miguel Martín Soria (Comunitat Valenciana) y Jesús Álvarez Menéndez (Asturias). Vieron los dos minutos los locales Edu Fernández, Josu Arzoz, Bazán, Bonanno, Itoiz y Aitor García, que acabó recibiendo la roja al acumular tres exclusiones; en cuanto a los visitantes, fueron excluidos Afonso, Dimitrievski (2), Toledo y el técnico David Pisonero.

Pabellón Anaitasuna. 770 espectadores.


En un nuevo ejercicio de delicatessen defensiva, acompañada de una portería de quilates, el Helvetia Anaitasuna volvió a hacer de su casa una fortaleza y amarró este domingo una gran victoria ante el Recoletas Atlético Valladolid (39-35) que le permite superar en la tabla a su rival, colocarse en la séptima plaza de la Liga y lucir 26 puntos –la temporada pasada firmó un total de 22–, a falta todavía de cuatro jornadas para terminar el curso.

Quique Domínguez recuperó a Nicolás Bonanno, algo que el equipo lo agradeció especialmente en la zaga, y también a Martín Ganuza, que al menos pudo jugar algún minuto tras mejorar de sus problemas de menisco. Ahora bien, se encontró con otro contratiempo, el de la ausencia de Oleg Kisselev, que acabó con alguna molestia en Torrelavega, aunque todo indica que podrá estar disponible para el choque del próximo sábado en Logroño.

Con la confianza de los dos puntos en tierras cántabras, el Helvetia se plantaba en su pista para reafirmar las buenas sensaciones de ese partido y cortar, de paso, la racha de un Valladolid que encadenaba tres victorias. Y lo hizo. Cumplió.

Los navarros encarrilaron el triunfo en una primera parte extraordinaria, donde el trabajo defensivo fue tan excelso que ello acabó repercutiendo en la faceta ofensiva, donde Ander Torriko y Aitor Albizu –MVP del partido– se salieron. Literalmente. Álvaro Gastón ponía los goles locales en los primeros compases, bien fuera desde el extremo, a la contra o desde los siete metros. A los ocho minutos, David Pisonero tuvo que parar el partido por primera vez, tras un parcial de 3/0 que abría brecha para Anaitasuna (6-2).

Bonanno dio el susto al lastimarse su rodilla derecha en una acción defensiva y abandonar la pista, aunque pudo volver. El partido, que parecía transcurrir con cierta normalidad, con rentas favorables para los navarros, entró mediada la primera parte en un incomprensible torrente de exclusiones. Josu Arzoz y Aitor García veían los dos minutos casi a la vez y poco después se sumaría Bazán. Durante unos segundos el Helvetia –que terminó la primera parte con cuatro exclusiones, las mismas que su rival– atacó con tres jugadores.

Aitor García, Josu Arzoz y Ander Torriko se esmeran en defensa. Iñaki Porto

El Valladolid, que jugaba al ritmo de su oponente, intentó tirar de la calidad y la efectividad de Álvaro Martínez, si bien por momentos se encontraba con las extraordinarias intervenciones de Juan Bar, que ponía el cerrojo a su portería desquiciando así a los que serán sus compañeros la próxima temporada

Con la inestimable ayuda del meta argentino, y una buena solidez defensiva, Anaitasuna fue incrementando sus ventajas hasta llegar al 18-11 al descanso.

Los navarros salieron motivados tras el paso por los vestuarios. Torriko, tras recuperar en defensa, marcaba. Y Aitor Albizu, enchufado, comenzaba su particular fiesta con la inestimable ayuda de Xavi González, que con sus sensacionales asistencias posibilitaba que el estellés se desfogara a la contra. Empezaba el recital.

Juan Bar no aflojaba, tampoco al parar desde los 7 metros, y el Valladolid intentaba frenar el embate navarro variando su defensa. Especialmente tirando de una 4/2 para noquear a Torriko y a Albizu.

Anaitasuna se movía en rentas de hasta diez goles, pero sin terminar de cerrar con claridad el partido. Los de Pisonero no bajaron los brazos y buscaron hacer daño con rápidas transiciones, aprovechando algunas pérdidas e imprecisiones locales en ataque. A falta de cinco minutos, el marcador reflejaba un 36-30. Algún nervio afloraba.

Pablo Itoiz vio los dos minutos y Aitor García era descalificado tras recibir su tercera exclusión. Circunstancias que dieron alas al Valladolid, que empezó a acercarse con cierta inquietud. Faltaba poco tiempo para el final, pero nada estaba decidido aún.

Miguel Camino puso el 38-34 a falta de dos minutos y unos pasos de Xavi González en ataque daban de nuevo el balón a un Valladolid que recortaba a un 38-35 gracias a Álvaro Martínez. La tranquilidad definitiva la puso, cómo no, Aitor Albizu en los últimos segundos con el 39-35. Era el golpe final. El de la victoria.

QUIQUE DOMÍNGUEZ: "HEMOS HECHO UN PRIMER TIEMPO EXTRAORDINARIO"


El técnico del Helvetia Anaitasuna estaba muy satisfecho con el trabajo de sus jugadores tras el partido. “Hemos hecho un primer tiempo extraordinario. Dejar al Valladolid en once goles sólo se puede hacer con un magnífico trabajo defensivo. Han pasado también demasiadas cosas o alguien ha creído que han pasado demasiadas cosas, creo que no han sido tantas", añadía en alusión a las continuas exclusiones. "En la segunda parte hemos entrado muy bien, con un nivel defensivo altísimo, que durante tres cuartas partes del partido ha sido nuestra mejor herramienta. Las exclusiones y el cansancio han hecho que ese nivel en el segundo tramo no fuese igual y ellos consiguiesen demasiados goles y muy rápidos, así que no terminábamos de cerrar el partido. Hemos permitido que hiciesen goles en transiciones y en acciones muy cortas y ha habido cierta incertidumbre. Pero no ha corrido riesgo el marcador, aunque se han acercado mucho", apuntaba. Asimismo, calificó los 26 puntos actuales de "barbaridad". "Sólo se puede estar agradecido a los jugadores por cómo están afrontando esta segunda vuelta tan complicada", señaló.