Un día que jamás olvidará Belate

Belate Ronkal Ziganda tiene 12 años y no se pierde un solo partido en el Hermanos Induráin. Desde sus gradas anima, aplaude, vive y sufre cada uno de los enfrentamientos del Replasa Beti Onak. Pero su pasión no se queda ahí. Lleva toda la temporada recortando crónicas, reportajes y diversas informaciones del equipo que aparecen en el periódico y pegando todo ello en un cuaderno que destila cariño y admiración. Un cuaderno que este martes pudo enseñar antes de un entrenamiento a sus protagonistas, quienes quedaron gratamente sorprendidas por su entusiasmo.

Hace dos años que Belate, vecina de Etsain y estudiante de 6º de Primaria en el centro Atargi de Villava-Atarrabia, juega al balonmano. Y lo hace en el propioBeti Onak, en uno de los equipos alevines del club. Ahí alterna diversas posiciones. Juega de lateral e incluso de portera. “Hasta que puedas, juega de todo”. Este consejo lo recibía de la que es su jugadora favorita del Replasa Beti Onak: Olaia Luzuriaga. La capitana y guardameta ya conocía a la joven aficionada de verla en los partidos. Se había fijado en ella porque en todos los encuentros se pinta el número 16 en la frente, el que luce Olaia en su camiseta, y aunque incluso se han llegado a fotografiar juntas, Belate no se había atrevido a compartir con ella el cuaderno que con tanto mimo ha ido haciendo durante el curso.

Un cuaderno lleno de fotografías, recortes de titulares, fichas de partidos y en el que añade frases resaltando la actuación del equipo y en especial de su ídolo: –¡Olaia se para dos penaltis!–; o también ¡Olaia Luzuriaga la mejor! 

“Me gusta mucho el Beti y quería hacer algo bonito”, explica Belate sobre su gran trabajo. La joven jugadora cuenta que empezó a jugar al balonmano “porque lo veía, me gustaba y quería probarlo”. Y sobre su admiración hacia la capitana navarra, señala: “Me gusta mucho Olaia porque es muy maja, muy buena portera y juega muy bien”.

Para Belate las jugadoras del Replasa Beti Onak son un espejo en el que mirarse. Tiene sólo 12 años, pero todos los días es testigo de que con esfuerzo y trabajo, quién sabe, algún día puede acabar jugando en el primer equipo. “En un futuro me encantaría llegar ahí, la verdad”, confiesa.

Referentes para niñas y jóvenes

Todas las jugadoras del equipo quedaron asombradas por el cuaderno que, con cierta timidez, les enseñó su pequeña aficionada. “Qué pasada”, decían. “Es precioso”, se oía también. Todas ellas dejaron su firma plasmada en él y agradecieron el detalle regalándole una camiseta, correspondiente a la segunda equipación. Algo que a la joven jugadora le hizo mucha ilusión y compartió con un grupo de amigas y con sus padres, Saioa e Íñigo, que le acompañaban. Estaba feliz.

“Belate es el reflejo de lo que vivimos aquí todos los sábados. La grada llena y mucha ilusión, sobre todo de la gente de la cantera. Es algo que nos encanta”, comentaba Olaia Luzuriaga, quien ya la tenía fichada. “Nos viene a ver todos los partidos y suele bajar junto a otras jugadoras después. Nos dan la enhorabuena si ganamos o nos animan si perdemos. Es muy bonito”, reconoce.

La capitana del Replasa Beti Onak calificó de “locura” y “trabajazo” el cuaderno de su pequeña admiradora. “Es una maravilla la ilusión que tiene. Espero que no la pierda”. Y consideraba “muy importante” que tanto ella como el resto de sus compañeras sean referentes para otras niñas y jóvenes. “Es una responsabilidad para nosotras también, pero es fundamental para que esto siga creciendo”.

Olaia estaba orgullosa de ser “la favorita” de Belate. “Pero es que ella es la mía”, confesaba la portera.