En busca del equilibrio en las tareas domésticas

PAMPLONA. La 2 de TVE estrenó el domingo ¡Convive!, que define como "el primer programa sobre conciliación y corresponsabilidad en el hogar". Se trata de un formato de aprendizaje -un coach- dirigido a buscar el equilibrio en el reparto de las tareas domésticas, "sin discriminar ni al hombre ni a la mujer, sino con la implicación y complicidad de ambos". Sus responsables son los catalanes David Suriol y Miguel Janer, de la productora Globalset, los dos casados y con varios hijos. El primero es el profesor que visita a las parejas, analiza los cometidos de cada uno y propone pruebas y soluciones. El segundo, emplea una pizarra para analizar y juzgar los resultados. ¡Convive! busca la imagen de un hombre con inquietudes laborales y domésticas, "que aprende que la casa también es un trabajo y no es sencillo de hacer. La mujer, por su parte, tendrá que asumir que al que no sabe hay que enseñarle, y hacerlo con una actitud positiva y constructiva", según afirma la propia cadena.

"Por la educación que he recibido, todos mis libros y teorías han ido encaminadas a buscar el equilibrio en la relación de pareja, empujando al hombre a ser partícipe activo de las tareas cotidianas y proactivo en la relación de pareja", explica David Suriol. "Mis primeros libros de cocina -Cocina para estudiantes, Cocina para recién casados o El Manual de la Sección Masculina- ya iban encaminados a sugerirle al hombre adentrarse en el apasionante mundo de la cocina del día a día, y no solo la de fin de semana. Además de ser empresario, escribí con Miguel Marketing de pareja, una teoría muy práctica sobre cómo aplicar estrategias empresariales de marketing en las relaciones de pareja. De ahí y de mi experiencia en llevar mi casa surgen los temas de conciliación".

David Suriol es periodista, ha hecho varios programas de televisión, ha dado "cientos de conferencias sobre estos temas" y le gusta lanzar ideas para que la gente pueda reflexionar y aplicar consejos prácticos en sus vidas. Ese fue el motivo que le llevó a desarrollar este formato. "TVE vio rápidamente que las tareas de casa son un tema que afecta a todas las parejas, y que bien tratado podría convertirse en un programa de servicio público". De hecho, es el primer reality coach que emite Televisión Española. El creador del formato asegura que "gracias a estar en TVE hemos podido hacer un programa sin exigencias de guión, sin tener que tomar ejemplo de realitys que hay en otras cadenas, sin estar obligados a ofrecer lo que se cree que quiere la audiencia sino lo que nosotros creemos que queremos dar; y funciona. El público también reclama que la televisión, pública o no, transmita normalidad. Parece que los reality coach que hay en otras cadenas muestran casos que difícilmente nos encontramos en el vecindario... En ¡Convive! queremos mostrar lo que nos encontramos en el barrio, entre nuestras familias o en nuestra propia casa".

hacer pensar Suriol añade que "cuesta bastante encontrar parejas dispuestas a participar, sobre todo por el pudor de mostrar en público la intimidad... pero ahora que estamos en antena la gente podrá ver que no mostramos intimidades, sino situaciones". Matiza que "las mujeres son más proclives a querer arreglar la situación de desequilibrio en la que normalmente se encuentran, pero sus parejas se niegan rotundamente a aparecer en la mayoría de los casos. Aunque también hay mujeres pudorosas... hay de todo".

Esta temporada no aparecerá ninguna pareja en la que el varón sea quien cargue en exclusiva con las tareas de la casa. "No nos hemos encontrado con ese caso, aunque lo hemos buscado. Ayudamos mucho, cada vez más, pero no es cuestión de ayudar sino de responsabilizarse". En cuanto al enfoque del programa, David Suriol cree que "reírse de los demás es muy sencillo. También es fácil provocar, para crear cierto escándalo en la pantalla. Lo complicado es conseguir que la pareja negocie sin que lleguen a las manos, sin ridiculizarles. Es fácil hacer escarnio público de un hombre que no tiene ni idea de planchar, lavar, cocinar, cambiar un pañal, dar un biberón, hacer la compra... pero el programa no va de eso sino de hacer pensar para lograr un cambio de actitud. No es fácil".

Reconoce que "seguro que hay gente que se ofenderá con este programa. Somos tantos y pensamos de tantas formas que no será del gusto de todos, pero creo que sí de la mayoría. Solo queremos hacer sonreír y pensar". Para evitar repeticiones, las 13 entregas mostrarán "un amplio abanico de población. Los hemos encontrado en el campo, en la ciudad, en pueblos grandes y pequeños, en el sur, en el centro, en el norte, en el este y el oeste. Familias numerosas, familias con pocos hijos y familias sin hijos..., hemos buscado de todo. No me he llevado muchas sorpresas, pero sí que he visto diferencias culturales según las zonas en las que hemos grabado. Por ejemplo, la mentalidad de los urbanitas no es la misma que la rural. O una pareja que roza los 50 negocia de una forma totalmente diferente a como negocia una pareja de veintipocos años. Lo que sí hemos encontrado es un elemento común: que el hombre debe arrimar más el hombro y que la mujer debe tener más confianza en él".

En todos los programas hay situaciones divertidas, "desde un padre con tres hijos que no ha cambiado nunca un pañal y para hacerlo por primera vez ducha al bebé o el que desmonta las ventanas para limpiarlas. Otro prepara una cena para los amigos y les pide que traigan sus propias servilletas.

A su juicio, "la principal sorpresa es ver cómo los hombres que han tenido que hacer el esfuerzo, lo han hecho con ganas sinceras solo para mejorar. Se han puesto en nuestras manos y han aprendido a valorar la dureza del trabajo que soportan sus mujeres y que ellos no han sabido apreciar nunca. Ese es el primer logro. Los ecos posteriores han sido de mejoras, no de milagros". Ahora el equipo de Globalset espera que el programa también dé que pensar en las casas de los espectadores. "De lo que sí estoy seguro es de que va a generar debate. Lo preocupante es que la mayoría de las veces los debates se convierten en discusiones, y en el programa mostramos que estos temas no hay que discutirlos, hay que negociarlos".