la logística de producción es muy compleja, así que el año que viene los Goya se seguirán celebrando en Madrid, pero a partir de 2019 podemos empezar a pensar en traerlos a Pamplona”. Así lo afirmó ayer Joan Álvarez, director general de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, durante un acto en el que la entidad desgranó algunos aspectos del proceso de renovación en el que está inmersa, dentro del cual desarrolla proyectos como La Academia en red. Esta iniciativa pretende organizar actividades en aquellas ciudades o autonomías que realizan una apuesta decidida por la cinematografía, caso de Navarra, de manera conjunta con los profesionales y las instituciones de dichas zonas.
La Comunidad Foral ha sido la segunda parada en la gira de presentación de La Academia en red. La primera fue Valencia, donde este año se celebrará la entrega del Premio Muñoz Suay. Junto a Joan Álvarez, al acto de ayer, celebrado en Baluarte, asistieron la montadora Julia Juániz, miembro de la junta directiva de la Academia, y la productora y académica Puy Oria, ambas navarras. Los tres compartieron mesa con la consejera de Cultura, Deporte y Juventud del Gobierno foral, Ana Herrera, que destacó que, precisamente, el trabajo en red es “uno de los empeños del sector en Navarra”, de ahí la reciente creación de Clúster Audiovisual de Navarra (ClavNa), así como la consolidación, en 2016, del incentivo fiscal a rodajes. Herrera citó algunas cifras que “refrendan” este buen momento, como los siete largos que se han filmado en en el primer semestre de 2017, los tres de productoras foráneas que se rodarán en breve y los cinco proyectos locales que harán lo propio en lo que queda de año. Y, como “última pieza del puzzle”, citó las ayudas que su departamento concede a la producción de largos y de cortos, al desarrollo de proyectos y, como novedad este año, a la asistencia a ferias y festivales. Reconociendo que estas subvenciones siguen siendo “modestas”, subrayó que en 2017 el montante total se ha incrementado en un 43%.
cine y escuela, igualdad y solidaridad Julia Juániz, experimentada montadora de reconocidos títulos estatales e internacionales, hizo un llamamiento a los profesionales de la Comunidad Foral para que se informen sobre las posibilidades de ingresar en la Academia en esta nueva etapa. “Para mí es importante ver una academia renovada; lo estatutos y reglamentos están cambiando”, señaló, y reconoció que fue idea suya hacer esta presentación en Navarra, “donde de momento, hay pocos académicos”. Puy Oria, presidenta de la Asociación Madrileña Audiovisual, coincidió y añadió que “si quieres tener voz y voto, tienes que estar”. En ese sentido, valoró positivamente el giro que está dando la Academia, “para modificar esa idea de que solo organiza los Goya”. “Aquí, en Navarra, se harán las actividades que decidan los académicos navarros”, señaló, y alabó “el paso adelante” que ha dado el territorio foral en el ámbito audiovisual, “en el que tenemos que ser pioneros a nivel estatal”.
En efecto, la Academia organiza los Goya, retomó Joan Álvarez, que lleva tres meses como director general de esta asociación de profesionales que reúne a 1.400 personas y que actualmente preside Ivonne Blake, con Mariano Barroso y Nora Navas como vicepresidentes. La entrega de los premios es uno de los aspectos que “vamos a cambiar del todo”, dijo Álvarez, que contó que recientemente se ha escogido, de entre 18 candidatas, a la empresa que se encargará del planteamiento artístico de la gala de 2018, “y estamos a punto de firmar un convenio con el Circo del Sol para que participe”. Asimismo, “vamos modificando las bases de los premios continuamente” para que se adapten a cada momento, aunque, en su opinión, el cambio debe ser más profundo, y su intención sería llegar, “a largo plazo”, a crear una Academia de Cine, Televisión y Videojuegos; un objetivo que “implica un proceso de negociación complejo”.
De momento, la entidad ha puesto varios proyectos en marcha, como esta red “que queremos crear con nodos -lugares- en los que haya una densidad de actividad cinematográfica especial, como es el caso de Navarra”, que podría participar en varias de las líneas de trabajo ya iniciadas y que encabeza Cine y Educación, propuesta que persigue “formar nuevos espectadores”, fomentando “el orgullo hacia nuestro cine”. En estos momentos, reveló Álvarez, existen en el Estado un centenar de proyectos que se mueven en estos parámetros, “hicimos un seminario con varios de sus responsables y ahora hemos creado una plataforma para discutir varios temas”. Por ejemplo, hay que decidir “si creamos un programa educativo estándar, cómo intervienen los educadores, cómo intervienen los cineastas, si las películas que se empleen deben tener una licencia especial...”, apuntó el director, que lleva un mes hablando con el Ministerio de Educación para sacar adelante esta iniciativa dentro del currículo complementario de Primaria y Secundaria.
Otra de los planes en los que trabaja la Academia tiene que ver con fomentar la igualdad entre hombres y mujeres en la profesión, para lo que se organizarán varias actividades, como un foro en el próximo Zinemaldia, en el que se pondrá como ejemplo el modelo sueco. Además, la entidad se afana en que los cineastas “tomen conciencia de que son una comunidad y actúen de manera solidaria entre ellos”, y en compartir miradas con academias de todo el mundo, a través de un congreso mundial que se celebrará el año que viene.
