PAMPLONA. Jabier Villarreal fue mucho más que un pintor; fue un experimentador, un creador crítico no solo de obra sino también de espacios de diálogo, y pionero en técnicas de nuevas tecnologías que "mezclaba cosas inmezclables", dice la que ha sido su compañera de vida, la también artista Ángela Moreno. A lo largo de sus más de 30 años como docente en la UPV, Jabi dejó huellas duraderas en numerosos alumnos, y también en colegas de profesión, como los que le recuerdan ahora en la Galería ArteA2. Homenaje a Jabier Villarreal es la propuesta expositiva de este febrero, comisariada por la propia Ángela Moreno y José Luis Mayor, quienes también aportan obra a esta muestra.

Hasta el próximo día 29 saca a la luz el espíritu de Villarreal, fallecido el pasado junio, a través de algunas de sus obras pero sobre todo de creaciones de sus compañeros y compañeras de arte y de vida. Junto a Mayor y los hermanos Ángela y Iosu Moreno, exponen obra Izaskun Álvarez, Ángel Arbe, José Miguel Corral, Félix Ortega, Patxi Aldunate, Alfredo Murillo, María Jiménez, Asunción Goikoetxea, Xabier Idoate y Xabier Barrios. Pintura, fotografía, vídeo, collage, instalación o arte textil dialogan en este homenaje componiendo un recuerdo coral concebido desde el cariño, la admiración y la libertad creativa. "Esta exposición ha surgido de una manera muy natural desde el cariño de artistas amigos de Jabi. Falta muchísima gente, porque el espacio es limitado...", cuenta Ángela Moreno.

Ella y su hermano Iosu firman dos evocadores objetos-luz creados expresamente para esta muestra. "Hemos trabajado juntos pero de manera respetuosa e independiente. Iosu ha hecho la estructura de acero y cerámica, y yo el trabajado el papel (cozo y de arroz), dejándonos llevar sobre la marcha", cuenta la artista sobre estas piezas que nos conectan con lo más orgánico de la vida y la pureza de lo natural.

La compañera de vida de Jabier Villarreal recuerda al artista como un "pionero, innovador y creador de una gráfica nueva, al tanto siempre de lo último que salía, incorporándolo en el aula, y a su trabajo". Como la técnica de creación de paisajes a partir de un escáner láser 3D, tecnología de la que se sirvió en sus últimos proyectos como Beltz, del que se exhibe una muestra en ArteA2 (obra en papel y vídeo).

"Se metió de lleno en esa tecnología y la llevó a su manera de concebir el arte", explica Xabier Idoate. Él aporta a este homenaje la obra Aurrera koop (impresión digital, 2019), que parte de una fotografía luego manipulada y dibujada, garabateada tomada en una visita que hizo con Villarreal a la zona industrial, "hoy muy en decadencia", donde se ubica el edificio de la Cooperativa Aurrera, en Sestao. Una obra que refleja esa "tensión entre lo que desaparece y lo que se crea nuevo". "Todo lo que hago ha tenido conexión con Jabi en algún momento porque siempre nos llamábamos por teléfono, nos contábamos lo que estábamos haciendo. Trabajamos muchos años juntos en la facultad, en el mismo laboratorio, nos hemos peleado con todas las tecnologías durante un montón de años...", dice Idoate, quien lamenta que Villarreal se fuese cuando "estaba en su mejor momento creador".

Otra artista muy vinculada a él es Izaskun Álvarez Gainza (Donostia, 1982). "Compartí despacho con Jabi en la facultad de la UPV y para mí ha sido una figura que lo engloba todo. Una pareja de trabajo muy importante que transmitía siempre un disfrute con lo que hacía, tanto en el aula como en su taller", cuenta la artista, que aporta a ArteA2 la pieza Between (collage y papel, 2015), que realizó "estando Jabi conmigo delante" y con la que genera espacios comunes y evocadores a través de sugerentes textos que activan al espectador. Al pensar en la marcha de un amigo, a Félix Ortega le vino a la mente su serie Transparencias, de la que muestra en Zizur Mayor una pieza (óleo sobre cartón) que combina "tensión y búsqueda de equilibrio". "Me pareció una pieza adecuada para alguien que se va. No es una pieza constructiva sino nocturna, iluminada por una luna fría. Ante una despedida así, los que nos quedamos aquí creemos que es necesario poéticamente buscar un destino, un lugar", reflexiona Ortega. Xabier Barrios, fotógrafo y compañero de la facultad del homenajeado, aporta Aleph, una serie de seis fotografías polaroid realizadas en 2006. "Es el título de un relato de Borges en el que el concepto Aleph designa un mundo contenido en un baúl.

Un mundo metafísico, pero en contacto constante con la realidad, de manera que los dos se confunden y complementan. A partir de ese relato, traslado ese concepto al del arte y propongo la imagen de un umbral que se expande en el horizonte, que da paso al mismo espacio percibido, si cabe, de otro modo", explica el autor. Marguleku (óleo y yeso sobre lienzo, 2006) es la aportación de José Miguel Corral. "A Jabier Villarreal le apasionaba lo gráfico, desde sus obras de Lumbier hasta su último descubrimiento del escáner. Cuando me pidieron participar en este homenaje pensé en esta obra cuyo título se podría traducir como lugar descolorido, y que tiene algo de gráfico y algo de pintura.

En este sentido, tiene que ver con la pasión de Villarreal por encontrar la falsa pintura", cuenta Corral. El arte textil lo pone María Jiménez Moreno quien coincidió con Villarreal en el colectivo Artamugarriak, con La labor. Siguiendo el hilo... (2018). Dos bastidores redondos de 30 centímetros de diámetro donde se ven a unas mujeres cosiendo en el espacio público.

Cada elemento está dibujado (cosido) con un único hilo de color. La caída del imperio navarro (técnica mixta sobre tela) es la obra elegida por José Luis Mayor para recordar al creador navarro. Una versión de un cartel de los años 60 de los Rolling Stones en el que sustituye las figuras del mismo por pintores y pintoras de la tierra, Villarreal entre ellos, a modo de cartel de un concierto con el reclamo La caída del imperio navarro.

La relación de Alfredo Murillo con Jabi empezó "hace mucho tiempo, cuando en segundo de carrera me tocó como profesor de dibujo. Me ayudó en mis primeras incursiones con un ordenador para realizar arte, en un ámbito en el cual él también estaba iniciándose. Me enseñó a ver el mundo del arte y su entorno desde un aspecto crítico, a veces con una gran carga de ironía y cinismo. Más tarde nos encontramos ya como creadores y activistas dentro del colectivo Artamugarriak, donde compartimos acciones y sobre todo conversaciones, todas enriquecedoras y estimulantes". Murillo aporta a este homenaje la obra Where is John Galt? (fotografías y metacrilato, 2020), y pertenece a una serie de collages fotográficos donde reflexiona sobre "distintos elementos de la iconografía capitalista uniéndolos al ámbito de los nuevos movimientos pseudo religiones".

Las tres evocadoras y delicadas obras realizadas en tinta-acuarela sobre papel por Asunción Goikoetxea lucen en la galería junto al collage gráfico que firma Ángel Arbe realizado este mismo 2020, y una obra sin título realizada hace unos diez años por Patxi Aldunate en técnica mixta sobre metacrilato, que cuelga de la pared de ArteA2 por un motivo muy claro: "A Jabier Villarreal le gustaba especialmente esta obra, solía decírmelo cuando venía a mi taller. Por eso la he traído", cuenta Aldunate sobre esta pieza que "trata un tema que él (Villarreal) también ha tratado en su arte, el de la arqueología industrial, las ruinas, los espacios inhabitados o abandonados", dice Aldunate, quien recuerda al homenajeado "siempre contento y a la vez tan crítico... Deja una huella que no se borrará fácilmente", asegura.