Cima navarra en el Ama Dablam

PAMPLONA. Cuando en estas latitudes la mayor parte de la gente aúnse estaba desperezando, hacia las 8.00 hora peninsular (11.45 hora enel Himalaya), Javier Camacho levantaba su piolet en la cima del AmaDablam (6.812 metros). Unos minutos después su compañero de cordadaJavier Zabalo clavaba sus crampones en la cumbre de esta espectacularmontaña y ambos se fundían en un abrazo. Era el momento más grato deuna expedición en la que, sin embargo, las cosas no habían salido deltodo bien desde el comienzo.

Ambos montañeros llegaron a Katmandú a mediados de octubreacompañados de los montañeros Javier Arrobarren, Josefina Zabaleta yCruz Lizarraga. Juntos acometieron el ascenso del Island Peak (6.189metros), después de lo cual Zabaleta y Lizarraga dieron por concluídosu periplo en el Himalaya. Arrobarren, no obstante, se quedó conCamacho y Zabalo con la intención de apoyarles en la ascensión al AmaDablam. Sin embargo, tras una semana en el campo base las nevadasapenas habían dado tregua y a los tres montañeros les había tocadotirar de paciencia. Hasta esta semana. Con la llegada del mes denoviembre llegaba también la primera ventana de buen tiempo, escasaaunque suficiente.

Camacho y Zabalo, con Arrobarren como apoyo, se pusieron manos a laobra. En primer lugar la cordada ascendió hasta el campo 2, allíesperaron varias noches a que el tiempo mejorase. El martes unaexpedición comercial ascendió hasta la cumbre, algo que animó a losalpinistas a emprender el ataque a cima, en su caso, no obstante, sinla ayuda de oxígeno suplementario. El martes Zabalo y Camacho llegaronal campo 2 y, por fin, ayer uno detrás de otro coronaban esta bellamontaña. Tras conseguir su objetivo de cumbre Camacho y Zabaloemprendieron el descenso. Tras desandar lo andado y afrontar variosrápeles, cuatro horas después de hacer cumbre Camacho y Zabalo llegabanal campo 2.

En principio ambos montañeros tienen previsto descender al campo 1a lo largo de la mañana y el viernes alcanzar por fin el campo base.Será entonces, reunidos con Javier Arrobarren, cuando pongan el brochede oro a la expedición. Camacho pamplonés de adopción y Zabalo lodosanoya habían ascendido juntos el Cho Oyu (8.201 metros) el pasado año.