Incidentes en Alsasua

pamplona - El partido entre Alsasua y Lagunak de Segunda Juvenil que se jugó el sábado por la tarde terminó con una denuncia por parte del árbitro Stefan Sabev ante la Policía Foral, después de 90 minutos sin incidencia aparente. Al término del encuentro, que finalizó con el resultado de 1-3, un aficionado esperó al árbitro a la salida del campo, le insultó, le amenazó y le agarró del cuello, a lo que el colegiado respondió interponiendo una denuncia ante la Policía Foral.

El partido había transcurrido con la tensión propia de un encuentro donde dos equipos compiten por su objetivo y acabó con victoria visitante y la expulsión de un jugador por parte del equipo local. Por lo demás, el encuentro llegó a su fin sin más incidentes sobre el campo, aunque el árbitro, según relató a la Policía Foral, ya había escuchado en el campo continuos insultos y amenazas por parte de un espectador, al parecer padre de un jugador local, que llegó a amenazarle con esperarle a la salida.

Stefan Sabev, sin embargo, entró al vestuario con normalidad, completó el acta, se duchó y cuando salió de las instalaciones se encontró con que el aficionado en cuestión le esperaba en el aparcamiento. Por lo que relató el colegiado, el aficionado siguió insultándole y amenazándole y se acercó a él para agarrarle del cuello. El colegiado dijo que iba a llamar a la Policía, ante lo que el aficionado se metió en su coche y se marchó.

El árbitro llamó a la Policía y, al llegar los agentes, trasladaron a la víctima hasta la comisaría para interponer la denuncia, aportando la matrícula del coche en el que el aficionado había abandonado las instalaciones. La Policía Foral tramitará el atestado por un presunto delito leve de amenazas.

Stefan Sabev es un árbitro de Primera Regional, que lleva media docena de temporadas en el Comité Navarro.

Desde el Alsasua, su coordinador Gorka Pascual acogió la noticia con sorpresa, ya que en el campo nadie se había enterado de nada. “He hablado con los entrenadores, con el delegado, y nadie vio nada. Dicen que el partido transcurrió con normalidad. El delegado cogió el acta y se marchó. El responsable de las instalaciones tampoco vio a la Policía Foral. Lógicamente, si ocurrió algo debió ser cuando todos se habían marchado. En el Alsasua queremos saber qué ha pasado realmente y, si esto es así, que estas cosas no se vuelvan a repetir”.