HELVETIA ANAITASUNA (21+15) Juan Bar (portero), Gastón (4), Bazán (1), Edu (4), Meoki (2), Chocarro (1) y Del Arco (2) -siete inicial-. También jugaron Cancio, Etxeberria (4), Héctor, Aitor García (1), Izquierdo (10, 3p), Adrián Ortiz (5), Bonanno (1), Pedro Casas y Aitor Albizu (1).

ÁNGEL XIMÉNEZ PUENTE GENIL (12+11) De Hita (portero), Délcio De Pina (4), Maildo (1), José Cuenca (1), Javi García (1), Pere Aranau (4) y David Estepa (3) -siete inicial-. También jugaron, Konecky (portero), Joao Da Silva (1), Felipe Borges (2), Xavi Tua (2), Pomeranz (3) y Corning (1).

Marcador cada cinco minutos 1-3, 5-6, 11-8, 14-10, 17-10 y 21-12 (descanso); 23-13, 26-16, 29-18, 32-20, 35-22 y 36-23 (final).

Árbitras Tania Rodríguez Estévez y Lorena García Gil. Excluyeron dos minutos a los locales Héctor González (2) y Etxeberria. Descalificaron con roja directa a Chocarro; por los visitantes, excluyeron a Borges y a Arnau.

Pabellón Anaitasuna. Unos 1.000 espectadores.

Trece goles. Ni más ni menos. Número fatídico para los supersticiosos. La gloria ayer para el Helvetia. Trece son los tantos que le sacó el equipo navarro a todo un Puente Genil. Un rival que visitaba Pamplona como una de las revelaciones de la temporada y que, sin embargo, decepcionó. Anaitasuna fue muy superior, en ataque y en defensa, y amarró un 36-23 que le permite sumar dos puntos más y llevar cinco partidos sin conocer la derrota -con cuatro victorias y un empate-.

Y eso que no comenzó nada bien la contienda, con un parcial de 0-3 que hizo presagiar lo peor. Pero ahí se quedó. El Helvetia se repuso, fue capaz de contrarrestar las paradas de un Álvaro de Hita que sigue muy en forma, y empezó a imprimir un ritmo altísimo al juego. Gracias a Bar, inconmensurable en la portería. A su defensa, muy atenta. Y a unas contras imposibles de frenar para los cordobeses. La cantera, además, hacía su aparición y a lo grande, con un Ortiz que se divertía marcando. La ventaja iba a más y al descanso se reflejaba un 21-12.

Sin Pereira -con una rotura de fibras-, ni Ganuza, ni Torriko, Chocarro se unía a ellos en la grada nada más empezar la segunda parte tras ser descalificado al oponerse a Cuenca en un lanzamiento a la contra. Pero ayer era el día del Helvetia. Todo le salía bien. Bloqueaba en defensa. Paraba en portería. En ataque, un brillante Izquierdo y compañía gozaban anotando. Y, junto a a ellos, los jóvenes Aitor Albizu y Pedro Casas se unían a la diversión. Anaitasuna era una fiesta. De goles. De juego. De balonmano. Y así, arrollador, terminaba una función perfecta.

JORNADA 8

HelvetiaAnaitasuna

CLASIFICACIÓN

“Quitando el inicio, hemos estado a un nivel altísimo y hemos hecho un partido muy completo”

“Sólo puedo felicitar a los jugadores. No esperábamos esta diferencia”

Entrenador del Helvetia Anaitasuna